BRAGA
La reforma constitucional para habilitar el proceso constituyente fue aprobada sin las normas para la participación de independientes, ni escaños reservados para pueblos originarios. Pero, sobre todo, sin paridad de género. Para expresar la molestia con la votación de los diputados y diputadas, en redes sociales convocaron a un cacerolazo a las 21.00 horas [ACTUALIZADA]
Con un total de 80 votos a favor, 62 en contra y 7 abstenciones, en la Cámara de Diputados no se alcanzaron los 93 votos que se necesitaban para aprobar las “normas transitorias” que se tramitaban dentro del proyecto de reforma constitucional para habilitar el proceso constituyente.
Dichas normas, ya aprobadas en la comisión de Constitución de la Cámara de Diputados, aseguraban la participación de independientes, los escaños reservados para pueblos originarios, pero sobre todo la paridad de género.
Tras la votación, en los pasillos del Congreso cundió la indignación y en redes sociales se convocó a un cacerolazo a las 21.00 horas para expresar el rechazo a la paridad en la constituyente.
En paralelo, se viralizaron los nombres de las parlamentarias que con su voto en contra de las normas, o su abstención, hicieron naufragar la paridad de género en la reforma.
Se trata de las UDI María José Hoffmann y Virginia Troncoso, y las RN Paulina Núñez, Sofía Cid, Camila Flores, Francesca Muñoz, Ximena Ossandón, Catalina Del Real y Erika Olivera. En tanto, Marcela Sabat se abstuvo.
Los casos de Ximena Ossandón, Erika Olivera y Marcela Sabat son los más llamativos, dado que las parlamentarias suscribieron con sus firmas la moción aprobada en la Comisión de Constitución de la Cámara de Diputados que solicitaba la paridad de género. Sin embargo decidieron aceptar la orden de su partido, Renovación Nacional, para rechazar la norma transitoria y alinearse con Chile Vamos bajo el argumento de que esos temas no eran parte del acuerdo original suscrito por los partidos de oposición y el oficialismo e pasado 15 de noviembre.
Pese a los llamados de sus colegas parlamentarias, finalmente las diputadas de Chile Vamos votaron alineadas con su coalición. Fueron víctimas del “lobby machista”, dijeron desde la oposición.
Las reacciones del mundo político no se hicieron esperar:
