BRAGA
Créditos: Foto de Marcelo Hernandez/Aton Chile
Según consigna el texto de la demanda laboral por “vulneración de garantías fundamentales” realizada por la enfermera Karen Domínguez, tanto Dougnac en su tiempo de decano de la Facultad de Medicina de la Universidad Finis Terrae, como el vicedecano, Mauricio Soto, manifestaron que las enfermeras no son inteligentes ni deben serlo, que basta que sean bonitas y que la Universidad es una exigencia innecesaria para ellas porque “sólo requieren un instituto”.
Hace seis días, el 4 de noviembre, asumió como subsecretario de Redes Asistenciales Alberto Dougnac, quien, en su puesto anterior como decano de la Facultad de Medicina de la Universidad Finis Terrae, fue denunciado por profesionales que trabajaron con él, quienes aseguran que era conocido en la facultad por constantes tratos machistas que denigraban a las enfermeras.
Según connota el reportaje de El Desconcierto, Karen Domínguez y Dominique Fuentes se atrevieron a alzar la voz por todas sus compañeras y colegas quienes fueron víctimas de tratos misóginos y machistas por parte de Dougnac.
Según consigna el texto de la demanda laboral por “vulneración de garantías fundamentales” realizada por Domínguez, “varias trabajadoras, incluyéndome, fuimos víctimas de conductas de maltrato y discriminación por parte del decano, Alberto Dougnac, y del vicedecano, Mauricio Soto. En efecto, desde la intervención de la Escuela, el tono de ambos se tornó autoritario y misógino, llegando a tomarse conocimiento público de la postura de dichas autoridades respecto de la Escuela de Enfermería. Los mismos manifestaron que las enfermeras no son inteligentes ni deben serlo, basta que sean bonitas y que la Universidad es una exigencia innecesaria para las enfermeras, sólo requieren un instituto (…) Había una visión de parte del decano que las enfermeras eran las secretarias de los médicos”.
Este proceso judicial hace algunas semanas llegó a un acuerdo de compensación económica entre ambas partes por los daños causados. Sin embargo, la demanda de Dominique Fuentes (27) sigue pendiente, ya que no han llegado a acuerdo en cuanto al monto de la indemnización.
Fuentes presentó una carta de autodespido el 30 de septiembre de 2019, carta en donde narra los malos tratos que sufrió en la Escuela de Enfermería de la Universidad.
“(…) Las expresiones vertidas por el decano, Alberto Dougnac, y del vicedecano, Mauricio Soto, quienes explícitamente a varias trabajadoras, incluyéndome, nos decían frases misóginas y violentas como que “las enfermeras no son inteligentes ni deben serlo, basta con que sean bonitas”; “ustedes las enfermeras son especialistas en todo, pero en realidad no saben nada”. Frases y malos tratos denigrantes realizados por los directivos de la Universidad, del cual fui víctima en varias ocasiones”, relata el documento al cual tuvo acceso el medio citado.
En este sentido, las profesionales declaran que la violencia de género es algo estructural en la Facultad de Medicina, puesto que, por ejemplo, carreras como Kinesiología, Medicina, Nutrición, todos los directores eran hombres, todos los secretarios académicos también, “las secretarias eran todas mujeres, ningún secretario hombre. Una desigualdad estructural tremendísima”, contó Domínguez.
