Ofrece una limpieza suave pero efectiva, eliminando residuos, maquillaje y exceso de grasa sin resecar la piel. Además, ayuda a mantener su equilibrio natural, dejándola fresca, hidratada y preparada para absorber los productos de cuidado de la piel posteriores.
Se trata de un cosmético que cumple a la vez la función de limpiador y tónico. Y es que además de limpiar las impurezas y los restos de maquillaje del cutis, tonifica la piel, es decir, regula su PH, que suele verse alterado durante la limpieza facial. La clave de este tipo de limpiador son las micelas, unas partículas que atrapan la suciedad (ya sea sebo, restos de maquillaje o del ambiente) y la arrastran sin necesidad de detergentes o aceites.
Es un producto ideal para todo tipo de pieles, y no hay una sola rutina de belleza que no lo necesite. Puedes usarla por la mañana como único limpiador para eliminar los restos de sebo que se hayan producido durante la noche, aunque también es perfecta como primer paso de una doble limpieza nocturna, más profunda. El agua micelar es un producto muy completo, con propiedades, que simplificará la rutina y mejorará muchísimo el aspecto y la salud del rostro y de la piel.
El agua micelar es un producto de limpieza facial suave y muy efectivo que está formulado a base de micelas, las auténticas estrellas de esta revolución con base acuosa. Las micelas son moléculas capaces de atraer la suciedad y el sebo del rostro, aislándola y transportándola a través del agua para eliminarla de la piel.
Funcionan como emulsionantes. Esto permite disolver los compuestos insolubles y por tanto, el agua micelar actúa como un “todo en uno” que además limpiar, consigue tonificar e hidratar la piel.
El agua micelar se puede usar tanto por la mañana, para eliminar el exceso de grasa que se genera por la noche y las impurezas adheridas a la piel que residen en la almohada. Y, también en la rutina facial de noche , para quitar todo el maquillaje. En este caso, se aplicará como primer paso de la doble limpieza.
1. Limpia la piel en profundidad. Elimina el maquillaje y la suciedad de una sola pasada con algodón o disco limpiador, sin necesidad de frotar.
2. No reseca la piel. A diferencia de otros limpiadores, el agua micelar no irrita ni reseca la piel. La acción de las micelas naturales la convierte en un producto todoterreno que deja la piel revitalizada e hidratada.
3. Simplifica tu rutina de belleza. Desmaquilla, pero también limpia y tonifica. En lugar de 3 pasos, tu limpieza solo necesita uno.
4. No deja residuos grasos después de eliminar el maquillaje, lo que permite que la piel respire y se sienta fresca.
5. Funciona como desmaquillante de ojos y rostro. Está diseñada para asegurar una eliminación rápida pero suave del maquillaje. Máscara de pestañas, eyeliner, sombra de ojos, labiales permanentes, lo elimina todo de forma sencilla.
6. Sirve para eliminar maquillaje «waterproof». Las micelas actúan como un imán que atrapa las partículas de suciedad que son oleosolubles o hidrosolubles.
7. No necesita aclarado. No necesitas estar cerca del lavabo para enjuagarte la cara. Sus ingredientes también calman la piel, por lo que puedes pasar directamente al siguiente paso en la rutina: la hidratación.
8. Previene la aparición de arrugas. es una de las propiedades que tendemos a obviar, pero de gran importancia. Al mantener la piel libre de impurezas, tonificada e hidratada, ayuda a ralentizar la aparición de arrugas. Algo muy obvio, pero que no cumplimos si la piel queda con restos después de la limpieza.
9. Es apta para todas las pieles. Por su alta tolerabilidad, es un limpiador que se puede usar en todo tipo de pieles. Por un lado, como no reseca, el agua micelar es apta para los cutis sensibles y los maduros. Además, por su capacidad para arrastrar el sebo, es ideal para las grasas y mixtas.
10. Tonifica la piel. El agua micelar hace las funciones del tónico a la vez que elimina la suciedad. Esto significa que restaura el nivel del PH del cutis, que normalmente suele verse afectado por la limpieza en sí. Aunque, en el caso de la doble limpieza, sí tendrás que aplicar un tónico después de aclarar el cutis en el segundo paso.