El recital «Con Víctor Jara siempre» reunirá a más de cien artistas nacionales – entre los que cuentan Inti Illimani, Joe Vasconcellos, Illapu, Gondwana- en un encuentro tributo para el progenitor de la Nueva Canción Chilena. Además, es una manera de recaudar fondos para la creación del centro de arte y cultura que proyecta la fundanción del músico. [Vea video]
Inti Illimani, Joe Vasconcellos, Illapu, Gondwana, charanguistas, chinchineros, bailarines, diabladas organilleros y cantores varios se apersonarán el 27 de septiembre para celebrar el nacimiento de Víctor Jara. En total la lista de invitados ya va en más de 100 artistas, todos interesados en participar en el recital homenaje. Pero en la fundación del músico dijeron que más de alguien tendrá que quedar fuera, porque son demasiados los que en una suerte de voluntariado adhieren al ritual que recordará al adelantado de la Nueva Canción Chilena.
La partida está anunciada a las 20 horas, pero desde las cinco de la tarde el Estadio Nacional tendrá las puertas abiertas para que se vayan acomodando los asistentes al tributo Con víctor Jara siempre, que, además, es un intento para reunir fondos destinados a apoyar la creación del Centro de Arte y Cultura Víctor Jara. Ese proyecto anunciado que se realizaría en el actual Estadio Chile siempre y cuando prosperen las gestiones del cambio de nombre de la institución deportiva y la administración quede en manos de la fundación del músico, cuyas tramitaciones continúan pendientes.
«El generar un centro de arte es necesario para Chile. Es importante trabajar en ese sentido. Espero que a través de la Fundación la nueva leva de músicos sean más buenos pa’ juntarse que nosotros, que somos producto de muchos viajes y nos cuesta un poco reunirnos. Es necesario hacer un centro cultural. El mundo está demostrando que por el camino que va paré que no va. Es un momento de valorar lo que no sabemos apreciar, el talento artístico y poético. Vuelvo a la famosa frase: Cuando los satélites no alcancen tiene que haber un corazón», precisó animado Joe Vasconcellos, el músico que dijo que no haría más conciertos masivos pero que arranca otra vez en los grandes escenarios.
Víctor virtual
Este año ha estado marcado por la compilación de gran parte de la obra en forma digital en una serie de discos. Además, el próximo martes se dará a conocer El derecho de vivir en paz, una suerte de video clip digital que reúne algunos fragmentos de la vida del hijo de Amanda y Manuel nacido un 28 de septiembre. El mismo tema musical fue re grabado por los vocalistas de cuatro grupos nacionales protagonistas del encuentro y que será el estandarte sonoro de la amplia reunión de músicos criollos.
«El cumpleaños es una magnifica ocasión. Los brasileños, los mejicanos y los argentinos siempre están buscando pretextos para juntarse, los chilenos somos menos bueno para eso», comentó Marcelo Colón, integrante de Inti Illimani.
Naturalmente en lo musical el repertorio del encuentro incluirá aquellas melodías clásicas de la obra de Jara, en las voces de sus herederos y en las versiones predicadas en discos desperdigados por el mundo entero. También entonarán algunas melodías vinculadas a esa rara avis que ha resultado ser La Nueva Canción Chilena.
Para el bailoteo de la fiesta llegaran las huestes herederas de la corriente que impulsó en 1968 la artista inglesa Joan Turner, la ex mujer de Jara, con la fundación del Ballet popular. Este comenzó a hacer coreografías sobre la base de la canción chilena, iniciando una manera de crear en el movimiento que han nutrido varias generaciones de coreógrafos.
«Con esa fuente musical propia nos acercamos más a hacer una danza propia. Estamos agradecidos que nos hayan invitado a hacer dos apariciones en el estadio», dijo Patricio Bunster, artista de la danza.
La convocatoria popular intenta aportar al arte y al desarrollo como una buena muestra de la capacidad de autogestión artística de los organizadores, que ya con bastante experiencia acumulada intentan ampliar la obra del músico y dar vida al centro cultural.
Además, no descartan la posibilidad de concretar una grabación discográfica, que se sumaría al abanico de compilaciones, antologías, reversiones que mantienen presente el espíritu del músico asesinado en 1973.
«A partir de la grabación que hicimos, de la canción El derecho de vivir en paz, estamos con la idea de seguir. Probablemente no sea un solo disco, sino que muchos. Nosotros quisiéramos que fueran muchos más y no sólo los grupos que participan acá», contó Marcelo Nilo.
Jara aprendió de su madre cantora campesina a tocar la guitarra y creció rodeado de tradiciones, como el velorio del Angelito. En algún momento de su vida estuvo en el seminario pero lo abandonó por cuestiones de vocación. Esa correría le dio el conocimiento de la música gregoriana. Poco tiempo después hizo el servicio militar.
Multifacético, inquieto y vanguardista se interesó por las artes dramáticas y la dirección teatral. En lo musical investigó el folclor campesino, denunció los atropellos del abuso del poder y elevó su voz en recitales en Cuba y en México, cuando viajó en calidad de embajador cultural.
Parte de su legado contempla discos como Víctor Jara (1966), Pongo en tus manos abiertas (1969), El derecho de vivir en paz (1971), Víctor Jara habla y canta (1972), Víctor Jara /(1971), En México (1971), La Población, ese trabajo experimental que hizo cuando ingresó a las zonas suburbanas con una grabadora y registró el testimonio de los pobladores y que luego grabó en el disco. A lo que se suma el disco que no alcanzó a ser publicado y que hace poco fuera relanzado Canto pro travesura (1973), donde se recopila el trabajo de investigación de canciones campesinas, como La beata , prohibida por la Iglesia Católica en los registros originales mucho antes de la edición que no logró venderse.
En adelante todo lo demás son compilados, ediciones póstumas y cintas aisladas de trabajos de corte experimental, como Arauco la obra que hizo junto a Mariano Casanova.
Hoy, a 28 años de la muerte de la brutal muerte de quien diera sentido y razón a la canción chilena, en la ruta otros siguieron, cantaron y crearon inspirados en él. Pero siempre queda la pregunta ¿en qué estaría haciendo Jara?
«Quizá en qué estaría. Lo que él hizo, lo vanguardista que fue, al igual que Violeta Parra, nos ha puesto en la obligación de nunca quedarnos en lo que hacemos y nos obliga a siempre estar buscando y a tratar de entender lo que viene. Víctor trabajó, en época en que había algunos estigmas, con Los Blops, con rock y si piensa que eso se hizo hace 30 años es bien comprometedor para todos nosotros. Queremos que el concierto sea una celebración de su música», agregó Coulón.
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