Veterano grupo, que actuará el próximo sábado en un teatro con capacidad para 8.000 personas, llegó a Shanghai procedente de Japón, después de décadas en que su música, y el rock en general, fueron objeto de censura estatal en el gigante comunista.
Todas las entradas para el primer concierto en China de los Rolling Stones se agotaron este jueves, confirmó un responsable de la promotora local de la banda británica, Emma Entertainment.
El veterano grupo, que actuará el próximo sábado en un teatro con capacidad para 8.000 personas, llegó hoy a Shanghai procedente de Japón, después de décadas en que su música, y el rock en general, fueron objeto de censura estatal en el gigante comunista.
Incluso ahora, pocos son los chinos que conocen la música de los Stones, aunque en las grandes ciudades muchos saben que se trata de una banda extranjera. «Es un grupo musical, o un DJ famoso, ¿verdad?», comentó una estudiante shanghainesa, apellidada Chen.
La joven explicó que el rock no es demasiado conocido entre la juventud china, mucho más aficionada al pop, en especial al que interpretan artistas de melodiosas voces procedentes de Taiwán y Hong Kong.
Durante las décadas de esplendor de la banda -los sesenta y setenta-, China experimentó la Revolución Cultural y sus años de mayor aislamiento del mundo occidental, cuando ni siquiera canciones que recorrían el planeta, como «Satisfaction» o «Jumpin’Jack Flash» podían traspasar sus fronteras.
Ahora, miles de seguidores chinos podrán escuchar a los Rolling Stones en vivo, aunque serán menos que las más de un millón de personas que acudieron a su concierto de Río de Janeiro el pasado febrero dentro de la misma gira, «A Bigger Bang».
Se esperaba que las entradas, cuyo valor oscila entre el equivalente a 37 y 370 dólares (entre treinta y trescientos euros), se agotaran antes del concierto, lo cual finalmente ha ocurrido a dos días de la cita con el grupo.
Los Rolling Stones iban a tocar en China tres años atrás, pero la irrupción del Síndrome Respiratorio Agudo y Grave (SRAG) les decidió a cancelar el concierto, que iba a presentar su disco de grandes éxitos «Forty Licks» (literalmente, «Cuarenta lametones», que Pekín dejó en 36 tras censurar cuatro canciones con alusiones sexuales).
En aquella ocasión, Cui Jian, padre del rock chino y prácticamente silenciado desde 1989, iba a actuar como telonero, y calificó la cancelación de «decepcionante».
Se desconoce si no tocar las canciones «Brown Sugar», «Honky Tonk Woman», «Beast Of Burden» y «Let’s Spend The Night Together» se mantiene por las autoridades censoras chinas, igual que entonces, como condición para poder tocar en el país.
Según el diario oficial Shanghai Daily, la ciudad se añadió a la gira de los Rolling Stones en el último momento, y añadió que Mick Jagger, voz de los Stones, afirmó que la banda no podía volver a perderse su cita con China.
EFE
