Curada por Pedro Montes, dueño de la galería D21, la exposición “Arder” será inaugurada el jueves 14 de enero. “Sus trabajos visuales son principalmente retratos o acciones de arte registradas en fotografía y video”, cuenta el galerista.
La exposición “Arder”, del fallecido artista y escritor Pedro Lemebel, que reúne los trabajos artísticos que desarrolló desde fines de los años 80 hasta su muerte, será inaugurada el próximo jueves 14 de enero en el Museo de la Memoria (Matucana 501, Metro Quinta Normal).
Esta muestra incluye registros fotográficos y audiovisuales de performances e intervenciones en el espacio público, la mayoría de ellas inéditas.
El evento se enmarca dentro de las celebraciones por el sexto aniversario de la entidad, que se cumplen el próximo lunes.
Dos Fridas «Yeguas del Apocalipsis» fotografía Pedro Marinello
Estas incluyen además la exposición “Expolio”, de los artistas Diego Martínez, Josefina Guilisasti y Francisco Uzabeaga, que abre mañana, y el estreno el sábado a las 21:00 horas en la explanada del museo de la obra “Dominancia o la transgresión autorizada”, un teatro musical contemporáneo, en el que convergen y dialogan la actuación, el canto, la música, la imagen y el movimiento, dirigido por Andrés Bodenhofer.
En el caso de la exposición «Arder», un nombre que le otorgó el mismo Lemebel, Montes explica que se trata de una serie de trabajos visuales realizados por el autor, pero distintos a los que hizo con las Yeguas del Apocalipsis, en colaboración con Francisco Casas.
“Sus trabajos visuales son principalmente retratos o acciones de arte registradas en fotografía y video”, cuenta el galerista. “Estas fotografías son tomadas por sus amigos fotógrafos, como por ejemplo las fotos de Nueva York durante la marcha de Stonewell del año 1994, de Gabriela Jara, o los registros de estudio con fotógrafos como Paz Errázuriz, Pedro Marinello, Ulises Nilo o Mario Vivado”.
Fotografía de Gabriela Jara
Montes recalca que en todos estos casos era siempre Lemebel quien dirigía la escena, escenificaba el lugar, se maquillaba, vestía o trasvestía y en varias ocasiones se adornaba con plumas o pañuelos. “El personaje es siempre el mismo Lemebel”, explica.
Por lo mismo, el título de la muestra tampoco es casual. En palabras de Montes, “Arder” hace referencia al fuego y el neoprén, que actúan como combustible, y apuntan a lo marginal, formando parte esencial del imaginario de Lemebel.
“Sus últimas dos perfomances consistieron justamente en encender y hacer arder las escalinatas del frontis del Museo de Arte Contemporáneo y en encender y hacer arder el abecedario sobre una pasarela peatonal frente al Cementerio Metropolitano, donde descansan sus restos junto a su adorada madre”, rememora.
Video D21 Proyectos de Arte
“Arder” itineró antes en la Galería D21 (noviembre de 2014), primero, y luego en Metales Pesados, de Sergio Parra (marzo de 2015).
“Lemebel quería realizar una serie de performances que tenía proyectadas y nos propusimos en conjunto producir, ejecutar y registrar estas acciones, y generar el material para exhibir ‘Arder”, recuerda Montes.
Agrega que el criterio de selección de las obras lo dio prácticamente en totalidad el mismo Lemebel. “Él tenía muy claro el valor estético de cada una de sus obras y registros visuales. Sin embargo, también pudimos colaborar con Sergio Parra en la tarea de selección, formatos, enmarcados, etc.”.
¿Cómo se caracteriza el trabajo visual de Lemebel? ¿Cuáles eran sus temáticas, obsesiones e influencias?
“Lemebel trabaja visualemente a Lemebel”, responde el galerista. “Es un trabajo autorreferente, directo y rotundo”.
Fotografía Claudia Román
Montes explica que luego de trabajar casi dos años junto a Lemebel logró conocer y entender su método de trabajo, “muy estricto, disciplinado, y con una agudeza estética innata”.
“Las obsesiones o influencias de su obra visual son las mismas obsesiones e influencias de su mundo literario: los desposeídos, los marginales, la defensa de los derechos humanos, pero también lo desfachatado, lo raro y lo provocativo”.
Para Montes, su obra visual se emparenta directamente con sus relaciones literarias, siguiendo la línea de sus pares contemporáneos como el argentino Néstor Perlongher y los cubanos Severo Sarduy y Reinaldo Arenas, con críticos que avalan su obra como Paul Preciado, Jean Franco y otros.
El galerista resalta que la obra visual de Lemebel ha sido reconocida extensamente a partir de las performances y acciones realizadas con Francisco Casas cuando formaban parte del colectivo Yeguas del Apocalispsis, con imágenes hoy día icónicas como son “Las dos Fridas” o “La refundación de Santiago”.
“La obra visual personal de Lemebel está en su primera fase de conocimiento y de reconocimiento, sin perjuicio de que varias de estas imágenes ya son reconocibles pues ilustran la portadas de cada uno de sus libros”, destaca. “En la actualidad su obra visual ya ha comenzado a ser valorada por los coleccionistas y por el Museo de Bellas Artes, que recientemente adquirió cuatro de sus piezas emblemáticas”.
