Arte chileno en el extranjero
Izak One, es un arquitecto y artista chileno oriundo de Antofagasta, radicado hace 4 años en Estonia, país donde se ha hecho un nombre en la escena del street art. El lunes 5 de febrero ha inaugurado la primera exposición de pintura de un chileno en la emblemática Biblioteca Nacional de Tallinn (capital).
La muestra se titula “Musada”, cuya temática es una especie de homenaje-regalo para el primer centenario del país. Estonia posee una larga historia de ocupaciones y, por su posición geopolítica, siempre fue un botín apreciado por los países más grandes ( Alemania, Rusia, Polonia y Suecia). Esta idea queda reflejada en el óleo titulado “The country’s pride”, donde se ve una golondrina (símbolo cultural de los estonios) sobre un nido con forma de corona de espinas, en cuyo interior anidan dos huevos negros que llevan impresos los símbolos del nazismo y el comunismo.
Izak one entrega algunas coordenadas sobre el origen Musada: “Llamé así a mi exposición porque quise hacer un juego de palabra con los dos idiomas, español y estonio. MuSada viene de Minu sada que significa «mi cien» (refiriéndome a los 100 años de independencia), pero musada suena también como musa en español, y es precisamente como tomo a Estonia, como mi musa. Es la base e hilo conductor de la muestra”. Izak está casado con una estonia, la cual también ha servido de inspiración en su arte.
The country’s pride
Antes de vivir en Europa, Izak one desarrolló el street art en Chile, causando polémica en Antofagasta con su obra “El dulce derecho de mutilar”, mural en que presenta un cuerpo femenino en fragmentos, mostrando la cosificación mercantil de lo femenino. En Estonia ha participado en numerosos eventos y festivales de Street art.
Cuando llegó partió desde cero para hacerse un nombre en la escena del arte estonio. Cuenta que ha sido todo muy gratificante y recuerda que “una vez viajé a Tartu (la ciudad universitaria) para pintar en un festival, pero yo no estaba en el listado oficial de artistas, solo quería ir por motivación propia, entonces andaba buscando muros y le pedí ayuda a una amiga estonia para hablar con el dueño de casa y pedirle permiso para pintar su muro. Ella tradujo exactamente lo que yo le dije y el caballero accedió a que yo le pintara el muro. Luego me invitó a almorzar en su casa y conversamos, y me dijo que él también era artista junto con su esposa. Él fue maestro en la Academia de Arte en Tartu y pintó el mural de dicha universidad. Fue una coincidencia gigantesca que un streetartist le pintara un mural a una pareja de artistas senior (ellos deben tener alrededor de 75 años). Ellos quedaron muy contentos con mi mural”.
Izak one, sólo tiene palabras de agradecimientos por la acogida de su obra en Estonia. “Cuando vine a este país tuve que comenzar desde cero. Haber expuesto en un lugar emblemático de este país es muy gratificante. Me parece que soy el primer artista chileno en realizar una exposición de pintura, y representar a mi país estando tan lejos sin dudas es un sentimiento muy especial», agrega.
The embrace
En suma “Musada” cuenta con 10 pinturas que recorren la historia del país báltico, mirado desde la óptica de un extranjero. Donde su convivencia con su familia y amigos estonios fueron fundamentales para el proyecto, así como la ayuda de la Embajada de Chile en Finlandia. Sus cuadros cubren desde el nacimiento de la República Estonia, pasando por la II Guerra Mundial, el proceso de rusificación, la independencia en los noventa, hasta el auge de Estonia como un país digital. En palabras de Izak, el estilo de Musada es «figurativo con tendencias surrealistas».
“Traté de mantenerme simple y con un profundo significado. Que la gente con la primera mirada entienda el mensaje, incluso sin leer los títulos, donde cada cuadro está cargado de simbolismo en algunos más bien sutil y en otros mas literal. Pero la cuidadosa selección de ellos, mas el juego del color, me parece que hacen de cada pieza hable por sí sola”, añade.
The Russification
