CULTURA
La cinta, del director local Sergio Mata’u Rapu, sigue el devenir de cuatro isleños y cómo han enfrentado el explosivo desarrollo del lugar y sus consecuencias. Mama Piru dirige los esfuerzos en cuanto a reciclaje para reducir la basura, Mahani y Enrique usan la música para reunir a su comunidad dividida, mientras el padre de Sergio defiende firmemente las ventajas de construir nuevos negocios. Estas historias se entrelazan para revelar las complejidades del desarrollo y las contradicciones que surgen dentro de cada uno cuando se enfrentan a decisiones difíciles sobre el futuro del planeta.
Un documental sobre el problema de la basura y la contaminación en Rapa Nui se exhibirá próximamente en Chile.
La cinta, del director local Sergio Mata’u Rapu, sigue el devenir de cuatro isleños y cómo han enfrentado el explosivo desarrollo del lugar y sus consecuencias.
Mama Piru dirige los esfuerzos en cuanto a reciclaje para reducir la basura, Mahani y Enrique usan la música para reunir a su comunidad dividida, mientras el padre de Sergio defiende firmemente las ventajas de construir nuevos negocios.
Estas historias se entrelazan para revelar las complejidades del desarrollo y las contradicciones que surgen dentro de cada uno cuando se enfrentan a decisiones difíciles sobre el futuro del planeta.
El cineasta Mata’u Rapu ha pasado los últimos 15 años produciendo especiales de documentales y series que han estado al aire en History Channel, Discovery, National Geographic y PBS.
En este caso, la problemática del filme está estrechamente vinculada a la presión demográfica que sufre actualmente el lugar, tanto por la llegada de personas desde el Chile continental como el turismo.
La población local es de unas 8 mil personas, un aumento de 100% en los últimos 15 años, según cifras del Censo de 2017, a lo cual se suman unos 100 mil turistas al año. El incremento de los habitantes obligó a promulgar en 2018 la Ley 21.070 de Residencia y Permanencia en Rapa Nui.
El pueblo de Hanga Roa. Crédito: Sernatur.
Rapu, que demoró siete años en su documental, explica que quiso hacerlo con el fin de mostrar una historia moderna de su comunidad.
«El ambiente está lleno de películas, libros y artículos periodísticos sobre Rapa Nui que solo se enfocan en nuestro pasado y en general están hechos por extranjeros. Para nosotros era el momento de que nosotros, los rapa nui, tuviéramos una voz global», señala.
El cineasta cuenta que el plástico constituye un problema grave en la isla, especialmente los microplásticos internacionales que ellos no pueden controlar.
«La costa rocosa de nuestra isla hace casi imposible limpiar totalmente esta basura de nuestra patria, y cada día se acumula más. Tanto la basura plástica como de otro tipo que se acumula debido a la globalización, el turismo y un cambio en el estilo de vida», apunta.
Rapu admite que esto también es un problema, pero confía en que su comunidad busca enfrentar unida e intenta implementar prácticas sostenibles del resto del mundo.
La cinta, que su director caracteriza como una carta cinematográfica a su hijo Koa, tiene cuatro historias principales.
«Sirve de manera de marcar un momento en el tiempo de nuestra gente, pero también en pasarle información. Su nacimiento cambió mi vida, así que me era importante dirigirme a él», comenta.
«Mi padre, Sergio Rapu Haoa, es uno de los personajes. Aparte de ser una gran inspiración y motivación en mi vida, él ha liderado al pueblo rapa nui a través de varios periodos como arqueólogo, gobernador, y ahora como un anciano que ayuda a guiar un desarrollo que sea cultural y ambientalmente sensible con nuestro pueblo», dice.
Otro es Mama Piru, que influye hasta hoy en cómo los rapa nui deben tratar el medio ambiente.
«Muchos de sus valores eran del pasado, de cómo lidiamos con nuestra basura y medio ambiente a cómo nos tratamos mutuamente como comunidad», expresa.
Mahani y Enrique representan a dos jóvenes que han vivido fuera de Rapa Nui y regresan con nuevos conocimientos para solucionar los problemas de la isla.
«Al igual que Mama Piru, mantenían los valores del pasado, mientras seguían avanzando hacia el futuro, como mi padre. Ellos hacían una buena combinación con los otros personajes. En Rapa Nui hay mucha gente trabajando por un futuro mejor», detalla.
Cada una de estas voces es, no obstante, diferente y relevante en esta conversación, pero finalmente fueron elegidos porque representaban un amplio rango de pensamiento al interior de la comunidad.
Mama Piru es un personaje clave del documental.
Aunque se trata de una problemática compleja en el caso del plástico, el director destaca que ya se están ensayando distintas soluciones.
«Necesitamos avanzar hacia la reducción y reutilización de materiales», subraya.
En Rapa Nui, la reducción del material ya está ocurriendo de diversas maneras, incluidas varias empresas que proveen de agua en estaciones de recarga de agua, para que los locales y turistas puedan beberla sin tener que comprar una botella desechable, ejemplifica.
Otro ejemplo de reciclaje es lo que Mahani y Enrique hicieron en la Escuela de Música y de las Artes de la ONG Toki Rapa Nui, donde se recolecta basura en forma de botellas, latas y gomas para convertirlas en material de construcción.
Eso sí, «resolver el tema del microplástico en nuestro océano es un tema mayor». Este requiere que «todo el mundo haga su parte», concluye.
