CULTURA | CIENCIA
Se busca controlar con este método a la plaga del gorgojo del eucaliptus (Gonipterus platensis), que afecta el crecimiento del eucalipto, en especial de Eucaliptus globulus, que desde el año 1998 ingresó a nuestro país, proveniente de Australia y que afecta el crecimiento del eucalipto debido a que tanto larvas como adultos son defoliadores, es decir, que se alimentan de las hojas de los árboles, causando la ausencia del follaje.
Hoy día en Chile el incremento del comercio internacional y el flujo de pasajeros internacionales pone al país en una situación más vulnerable al ingreso de plagas, insectos que de no ser controlados, podrían causar un gran daño al sector económico. Su combate tradicional con insecticidas químicos es altamente tóxico, tanto para el ambiente como para quienes lo aplican e incluso, en ciertas ocasiones, para los consumidores.
Es por ello que la posibilidad de controlar plagas a través de control biológico resulta una alternativa mucho más sustentable y segura. El control biológico, es la acción de parásitos, depredadores y patógenos para combatir a otro organismo y controlar su población. Un ejemplo de ello son los hongos entomopatógenos, que actúan como parásitos de insectos, matándolos o dañándolos seriamente.
Sus ventajas radican en el hecho de ser específicos (no atacan a todos los insectos), son seguros para el medio ambiente y los seres humanos, y tienen menor costo de producción. A diferencia de los métodos tradicionales, cuyo valor es alto y no son específicos, es decir, al momento de la aplicación matan todos los insectos (incluyendo los benéficos y especies de insectos nativos).
En el caso de la investigación de la U. Austral se busca controlar con este método a la plaga del gorgojo del eucaliptus (Gonipterus platensis), que afecta el crecimiento del eucalipto, en especial de Eucaliptus globulus, que desde el año 1998 ingresó a nuestro país, proveniente de Australia y que afecta el crecimiento del eucalipto debido a que tanto larvas como adultos son defoliadores, es decir, que se alimentan de las hojas de los árboles, causando la ausencia del follaje.
Un grupo de científicos del Laboratorio de Salud de Bosques de la Facultad de Ciencias Forestales y Recursos Naturales de la UACh, ha dedicado dos años en la selección de hongos entomopatógenos que controlen esta plaga sin ocasionar un daño al medio ambiente como lo causan los insecticidas químicos.
En este contexto, el académico de la U. Austral, Cristian Montalva se adjudicó un proyecto que avanzará en esta materia, con el fin de encontrar las cepas más efectivas que permitan disminuir las poblaciones de este insecto. Se trata del Proyecto Fondecyt Regular 1190390 «Nuevos avances en la aplicación de hongos entomopatógenos para el control del gorgojo del eucalipto una plaga forestal en Chile”.
“En Chile se ingresó un parasitoide para controlar esta plaga y ha dado buenos resultados en la zona norte. Sin embargo, hacia el sur no ha tenido el mismo efecto ya que éste no ha podido adaptarse al clima frío”, indicó Montalva, enfatizando en la importancia de controlar este insecto que se asocia al follaje y que produce una merma en el crecimiento de la especie, al perder el árbol su capacidad fotosintética. “Este proceso podría también ocasionar más daños debido a agentes secundarios”, afirmó.
En un proyecto anterior, los investigadores identificaron 80 cepas de hongos entomopatógenos, de las cuales se seleccionaron cinco para que en esta nueva etapa sólo queden dos. Corresponden a hongos aislados de la región de Los Ríos y Los Lagos. Éstos serán puestos a prueba primero a escala de laboratorio, luego en condiciones de semi campo para posteriormente enfrentarlas a un escenario natural, observar cómo se comportan y ver si es que surge algún efecto no deseado en laboratorio frente a enemigos naturales.
“Es decir, queremos ver qué pasa si utilizamos estos hongos en terreno, si van a afectar especies que están conviviendo en el lugar y que no son plaga. La idea es que estos dos hongos no afecten a los enemigos naturales que fueron introducidos para controlar al gorgojo en las plantaciones de eucalipto”, destacó el académico.
Las restricciones para el uso de insecticidas químicos están aumentando, no solo por la contaminación ambiental que generan, sino por el peligro que su uso implica para aplicadores y consumidores. Por ello, iniciativas como ésta son tan relevantes.
“El impacto que se espera es que estas cepas, ayuden a bajar las poblaciones del gorgojo como un complemento a la acción del parasitoide. En el área agrícola, así como forestal, también se están regulando más el uso de insecticidas, por ello sería muy bueno tener un producto biológico de esta zona, para controlar el gorgojo en la región. Al término de este proyecto el objetivo es patentar el producto que obtengamos”, explicó el investigador.
En el marco de este proyecto, visitarán la UACh destacados expertos del área, como Christian Luz de la Universidad Federal de Goiás de Brasil y Richard Humber, unos de los micólogos más reconocidos a nivel mundial.
