CULTURA
Equipo compuesto por expertos en arquitectura y rehabilitación del paisaje, museografía y astronomía, propone la ejecución de mejores accesos, conexión con otros cerros, plazas y miradores, además del cuidado del ecosistema y la protección del cielo.
Tras tres meses de proceso, se anunció la propuesta ganadora del concurso para diseñar el próximo Parque Observatorio Cerro Calán. «Cerro Calán, parque natural de la observación», liderada por la arquitecta Paula Livingstone, fue la seleccionada por el jurado compuesto por especialistas y representantes de la U. de Chile, la Municipalidad de Las Condes y la Fundación Cerros Isla.
La idea del equipo conformado por expertos en arquitectura y rehabilitación del paisaje, riego, museografía y astronomía, además de participación ciudadana, pretende poner en valor el entorno natural del cerro, potenciar su condición de mirador natural e incorporar nuevas actividades y formas de observación de la naturaleza. Destaca su idea de reconocer y respetar el cerro y su entorno, realizando una rehabilitación ecológica más que restauración, debido que la degradación alcanzada no permite recuperar las condiciones iniciales.
“Los cinco finalistas eran proyectos interesantes y contenían ideas innovadoras. El proyecto ganador cumple con los lineamientos de diseño que permiten la construcción de un parque natural urbano, intervención a modo de acupuntura, diseño multifuncional, materia vegetal, diseño por pendientes, gradiente urbano natural (borde inferior), sustentabilidad y participación ciudadana”, señala Maytia Sáez, jefa de la Oficina de Arquitectura de la Facultad de Ciencias Físicas y Matemáticas (FCFM), quien fue parte del jurado.
La arquitecta destaca la conexión a escala metropolitana, comunal y barrial que ofrece la propuesta, con corredores verdes que vinculan los parques, la conexión con colegios y con centros deportivos comunales.
El decano de la FCFM, Francisco Martínez, indica que con el anuncio del ganador “se cumple otro hito importante en el objetivo que la facultad se trazó: hacer realidad, en el corto plazo y en colaboración con la Municipalidad de Las Condes, la creación del Parque Observatorio Nacional Calán, generando un polo de cultura, recreación y conservación donde se pueda apreciar y valorar la naturaleza terrestre y astronómica”.
El decano de la Facultad de Arquitectura y Urbanismo de la U. de Chile, también parte del jurado, calificó las propuestas como sobresalientes e innovadoras “que permitirán influir positivamente en la ciudad que queremos y desde luego, mejorar su calidad ambiental y la calidad de vida de la población”.
“El proyecto debe entenderse desde su contribución al territorio, al paisaje y al urbanismo al aportar un nuevo modelo de parque natural urbano, potenciando la multiplicidad de usos, de baja mantención -adaptándose a los efectos del cambio climático en la zona central- y como un aporte a la ciudad, a la naturaleza, a la astronomía y especialmente, a sus habitantes”, agrega.
Una de las acciones que propone el equipo ganador es mejorar las vías que conectan los accesos con el metro y estaciones de buses, a través de arborización, veredas amplias, pasos peatonales y accesibilidad universal. Además, de incorporar nuevos estacionamientos alrededor del cerro para los visitantes.
La condición de cerro isla se perderá ya que quedará conectado a una ruta verde propuesta por el municipio, con los grandes parques de la comuna. Se propone además una serie de plazas a lo largo del paseo de borde y la incorporación de 12 “hitos” o “artefactos” de observación de la naturaleza centradas en tres áreas de la ciencia: Astronomía, Geología y Ecología.
Además de ser un lugar de paseo, deporte, juegos, etc., y la promoción de la protección y la observación de la naturaleza, se plantea un uso eventual del observatorio y la plaza elevada, a cargo de la Universidad de Chile.
Finalmente, su propuesta de iluminación busca fortalecer la preservación de los cielos oscuros para así convertirse en ejemplo de iluminación urbana sustentable, respetando el cuidado de los cielos y el medio ambiente, por lo que se pretende intervenir mínimamente el cerro, siguiendo recomendaciones internacionales (International Dark Skies Association) y nacionales (OPCC y Fundación Cielos de Chile).
