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Desde la disidencia no dejaron espacio a la interpretación y decidieron marcar un punto quebrando la sesión. Recién iniciada la reunión, los partidarios de la lista de Maya Fernández se retiraron de las dependencias del Congreso Nacional en Santiago, luego de que no se votara una propuesta impulsada por el exministro Germán Correa. El encuentro continuó, aunque sin las figuras opositoras al actual timonel, a quien se ratificó en el cargo junto a su secretario general Andrés Santander. Ambos son los dos rostros que acusan estar marcados por la mancha del narcotráfico que hoy arrastra el partido. Ahora el PS tiene que resolver como va a seguir tratando de ser el partido ancla de la oposición y cómo, después de esta fractura, competirá en las municipales, la ultima oportunidad para derrotar a la derecha. (ACTUALIZADA)
Sucedió lo que se esperaba, la lista disidente no tuvo paciencia y al final se ratificaron los dos nombres en discusión. El quiebre es total en la interna y todo permanece igual en el Partido Socialista que queda en el suelo.
Desde la disidencia liderada por Maya Fernández no dejaron espacio a la interpretación y, en menos de una hora, decidieron marcar un punto y quebraron la sesión. Y, con una mesa totalmente desacreditada hacia adentro, pero también hacia afuera, ahora el PS comienza un camino lleno de piedras y no se ve luz.
El ambiente en el Congreso Nacional en Santiago comenzó tarde y distendido, a eso de las 11:40 y con charlas entre viejos conocidos como Osvaldo Andrade, Camilo Escalona, y el propio Álvaro Elizalde. Todo hasta que llegó una Maya Fernández flanqueada por Germán Correa y Fernando Atria.
El ambiente se tensó apenas iniciada la sesión, la que estuvo muy apegada a los estatutos. Germán Correa planteó realizar una mesa de consenso. Sin embargo, al estar votando la mesa, no lo dejaron y la idea fue desechada por el tribunal supremo presidido por Pablo Veloso; generando una gran molestia en la disidencia.
Luego, a eso de las 12:30, y luego que a Maya Fernández no se le permitiera la palabra -hecho catalogado por la disidencia como un ataque programado tras no proponer un nombre para la directiva- esta se paró y con ella casi todos los de su lista.
Las relaciones están cortadas hace rato y anoche hubo una ultima llamada desde el oficialismo interno del PS para ofrecer a su contrincante la primera vicepresidencia. Sin embargo esto fue de inmediato rechazado.
Las escasas reuniones entre ambas listas no surtieron frutos y se llegó al Comité de hoy sin acuerdo. Acusaron un cerco de protección y aquello se habría visto reflejado en la negativa de parte de los senadores para conversar durante las ultimas semanas.
Finalmente, el Comité Central siguió en reunión, aunque sin las figuras opositoras al actual timonel, a quien se ratificó casi por unanimidad en el cargo junto a su secretario general Andrés Santander. Ambos son los dos rostros que acusan estar marcados por la mancha del narcotráfico que hoy arrastra el partido.
El problema ahora se ramificara al resto de la oposición, que ya en un alto porcentaje notificaron que no aparecerán en la foto junto a Elizalde. Desde la disidencia advierten que durante las próximas horas se dará a conocer la renuncia de varios alcaldes al partido, quienes no estarían dispuestos a aparecer bajo la directiva de Elizalde.
Al desenlace de la sesión hubo encontrones entre personeros del bloque y la lista disidente reuniéndose en el café del museo precolombino para afinar los pasos a seguir.
«Perdimos la unidad de la oposición y, encima de todo, esto se da a a raíz de la mezcla del proceso eleccionario elegido por el tribunal supremo que aplicó normas liquidas, cambió los criterios reglamentarios en el curso del proceso como quiso y, a pesar de todo eso, se reconoció el resultado de la reunión de ahora», dijo el diputado Marcelo Schilling, parte de la lista de Maya Fernández que se quedó más tiempo dentro de la sesión del Comité.
El parlamentario, que finalmente se retiró porque según él lo cortaron, agregó que durante la sesión «daba la impresión que el Partido Socialista se debatía en la completa indiferencia frente a su situación con la sociedad».
Quien si se quedó hasta el final del Comité fue el expresidente del partido y también integrante disidente Osvaldo Andrade, quien, en tono golpeado, entregó una señal al grupo que se retiró dejando en claro que no le parece lo que se hizo.
Ahora el PS tiene que resolver como va a seguir tratando de ser el partido ancla de la oposición y cómo, después de esta fractura, competirá en las municipales, la ultima oportunidad para derrotar a la derecha .
Desde la lista de Elizalde parecieron no tomarle el peso a la situación y salieron a dar declaraciones sobre el apego a los estatutos y la ratificación de la actual directiva. El senador socialista continuó con su ceguera sin ver el cuadro grande que retrata la actual situación del PS.
