Para el abogado en delitos ambientales, que la COP25 se esté realizando en Madrid no hace mucha diferencia, porque asegura que nuestro país nunca estuvo muy preparado para llevar a cabo el evento. Pero fuera de la importancia de la cumbre climática, o si en esta versión se consigue el éxito de comprometer a las naciones en Contribuciones Nacionales Determinadas (NDC) más ambiciosas para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero, Cash se detiene en los graves problemas ambientales que tiene Chile, «que son de una profunda injusticia social», y especialmente en la agenda ambiental, que se encuentra postergada. Según el abogado, si no avanzan los proyectos como el de delitos ambientales, la reforma al Sea, al Código de Aguas, o la Ley de Glaciares, entre otras, y no se hace justicia en las zonas de sacrificio, es solo cuestión de tiempo «para que aparezcan nuevos estallidos y de mayor intensidad».