PAÍS
El TC rechazó algunas cláusulas del proyecto basándose en el principio de igualdad ante la ley y la no discriminación arbitraria, lo que obliga al Ejecutivo a pensar en un proyecto nuevo, mientras desde el FA pidieron la renuncia de Álvaro Bellolio, jefe de Extranjería. [ACTUALIZADA]
Luego de que el Tribunal Constitucional (TC) rechazara parte de las disposiciones que contiene el proyecto para una nueva Ley de Migración que impulsa el Gobierno, de a poco el asunto se ha ido convirtiendo en un problema para La Moneda. El trámite legislativo se vio ciertamente contaminado por las palabras de Álvaro Bellolio, jefe del Departamento de Extranjería y Migración, quien se despachó una analogía desafortunada para expresar su rechazo a la ofensiva del Frente Amplio (FA), que llevó el proyecto al TC. “Estaban muy contentos, muy orgullosos que cientos de miles de ciudadanos haitianos llegaran a Chile sin cédula de identidad y quedaran botados en la calle vendiendo obleas bañadas en chocolate en las esquinas».
Por cierto estas cuñas provocaron el inmediato rechazo en el conglomerado aludido, y Convergencia Social, uno de los movimientos que integra el FA, pidió la renuncia de Bellolio. En un comunicado, la colectividad expresó que los dichos del funcionario “resultan totalmente injustificados e inaceptables para un cargo directivo del aparato público, además de demostrar nuevamente el racismo y la xenofobia institucional desplegada por el Gobierno durante los últimos años, tanto en sus medidas como en su relato”, según consigna CNN Chile.
En Convergencia Social estimaron que las palabras de Bellolio «no solo son impropias de quien ocupa un cargo en el Estado, sino además porque profundizan y alimentan los discursos de odio y racismo hacia las personas migrantes en un momento en que la sociedad ha abierto un proceso de profundización de la democracia”, afirmaron. Según Alondra Arellano, presidenta del partido, es necesaria la renuncia de Bellolio. «Es inaceptable que el jefe del Departamento de Extranjería dé estas declaraciones llenas de racismo y xenofobia que solo contribuyen a generar estereotipos que dañan a la población migrante y alientan los discursos de odio», dijo.
La petición de renuncia ocurre después de que el propio Álvaro Bellolio diera otra entrevista para rectificar sus palabras. «La cita pudo haber sido mejor explicada en su contexto», dijo Bellolio a radio Pauta. Pero insistió en sus definiciones para defender el proyecto, antes de la decisión del TC. «Es importante que vayamos al fondo del asunto. La propuesta del FA y el PC fomenta un desorden migratorio, que los extranjeros vengan a Chile sin cédula de identidad o que vengan de forma clandestina, y eso afecta sus derechos, la integración y la relación entre nacionales y extranjeros», sostuvo.
Paralelamente, el subsecretario del Interior, Juan Francisco Galli, defendió también el proyecto como fue concebido y criticó la manera en que quedó después de la decisión del Tribunal Constitucional: «La gran mayoría de los artículos que fueron rechazados por el TC y aquellos que fueron acogidos pese a la convicción que nosotros teníamos que eran plenamente constitucionales, lo que hacen es dejar en peores condiciones a los migrantes», afirmó.
El Tribunal Constitucional se pronunció en contra de las siguientes materias del proyecto: la exigencia de visa a las personas de determinado país sin la existencia de un Decreto Supremo al respecto; tampoco se aprobó la condición de impedir la contratación con el Estado a empleadores sancionados por contratar migrantes ilegales; además se declaró inconstitucional expulsar a menores no acompañados, y la posibilidad de retener a una persona expulsada por más de 48 horas. La decisión del TC se basa en la igualdad ante la ley y la no discriminación arbitraria.
La molestia también llegó desde la sociedad civil. La Fundación Migra Chile, que expuso ante el TC durante la tramitación del requerimiento, expresó su total rechazo a las palabras del jefe de migraciones. «Las palabras del Sr. Bellolio asimilan migración con delincuencia y asume que los migrantes nacionales de Haití solo realizan una tarea que es la venta de ‘obleas con chocolate’, que por lo demás en ningún caso es una actividad despreciada, la venta ambulante de productos alimenticios u otros ha sido una salida para muchas personas tanto extranjeras como nacionales, que ante la actual crisis les ha permitido subsistir», dijeron.
Puntualmente se sumaron a quienes piden la renuncia inmediata del funcionario. «En cualquier parte del mundo y ante cualquier órgano internacional las declaraciones del Sr. Álvaro Bellolio en su calidad de Jefe del Departamento de Extranjería y Migración, serían duramente sancionadas exigiendo su renuncia, ya que como figura de autoridad no puede referirse con tal falta de respeto y bajeza a una de las comunidades más grandes que se encuentran en nuestro país, la cual merece todo nuestro respeto y acogida, por lo tanto exigimos su renuncia inmediata», expresaron.
