De esta manera se puso fin a una semana de extrema incertidumbre, que chocó diariamente entre los altos índices de contagios y la reticencia de La Moneda por recalendarizar la megaelección antes agendada para los días 10 y 11 de abril.
La presión se hizo insostenible, durante la semana habían sido la presidenta del Colegio Médico, Iskia Siches, y el exministro de Salud, Jaime Mañalich, quienes habían advertido de la necesidad de postergar las elecciones antes programadas para el 10 y 11 de abril y que consideraban la votación de constituyentes, gobernadores regionales, alcaldes y concejales. Luego la insistencia vino de parte del Consejo Asesor Covid-19, y se cuadraron con ellos las presidencias de ambas Cámaras del Congreso.
De esta manera, y sumado a una mayoría de candidatos presidenciales, y de un piso considerable de apoyo de parte del oficialismo y parte de la oposición, a La Moneda no le quedó más remedio que tomar una decisión de la que nunca estuvo convencida, como lo fue tener que anunciar el envío de un proyecto de ley para aplazar la megaelección de abril.
Previamente, y así lo habían señalado diferentes ministros del comité político, no había razones para pensar en que las elecciones no se efectuarían en la fecha antes estipulada, pero a medida que las cifras de contagios y la saturación del sistema de salud se fueron acrecentando, la convicción fue tornándose mayormente en voluntad.
Ante un escenario en que varios de los actores incumbentes calificaban de complejo, el Ejecutivo tomó dos grandes medidas para intentar sostener su postura: en primer término, concordó con el Servel realizar las elecciones en dos días, en vez de uno; y luego, agobiado por las cifras de contagios, una cuarentena total en la Región Metropolitana.
De esta manera, el domingo, y siendo desde temprano un secreto a voces, el Gobierno convocó a un comité político extraordinario donde también participó el ministro de Salud, Enrique Paris, para finalmente informar de la medida. Esto, a pesar de que un día atrás el propio Mandatario había intervenido en medio del informe de Salud para anunciar que las medidas se adoptarían con la anticipación necesaria.
Sebastián Piñera propuso este domingo al Congreso una reforma para aplazar las elecciones hasta el 15 y 16 de mayo, en medio del confinamiento que afecta a más de 16 millones de personas y de un avance sin control de la pandemia en el país. «Nuestra meta es que antes del 15 y 16 de mayo podamos vacunar a 9,3 millones de personas (…) y permitirá elecciones más seguras», sostuvo el Mandatario en cadena televisada.
«Esta ha sido una decisión muy difícil, pero debemos tomarla y tenemos la plena convicción de que es lo mejor para Chile y los chilenos», agregó Piñera.
Por otra parte, el Jefe de Estado dijo que las elecciones para elegir el nuevo Presidente y congresistas mantendrán su calendario actual, previsto para el domingo 21 de noviembre.
«La postergación de las elecciones requiere soluciones que den garantías a toda la ciudadanía. Además, medidas sanitarias y económicas que le den sentido a este cambio. De lo contrario, nos encontraremos en 5 semanas con una situación igual o peor», señaló la presidenta del Senado, Yasna Provoste, a minutos del punto de prensa de Piñera.
«Por ello he convocado a un diálogo amplio de todos los partidos y movimientos de la oposición, incluidos aquellos sin representación parlamentaria. La reunión será virtual, mañana lunes a las 9.00 horas», agregó Provoste vía Twitter. Al encuentro, de acuerdo a la parlamentaria, están convocados presidentes, secretarios generales y jefes de bancadas del Senado y la Cámara de Diputadas y Diputados.
El diputado RN Gonzalo Fuenzalida valoró la decisión del Gobierno y señaló que le pareció «acertada», por lo que espera que mañana «podamos tramitar este proyecto en la comisión de Constitución para luego votar en Sala y ver todos los detalles que conlleva poner en pausa la elección, para darles tranquilidad a los candidatos».
Por el contrario, su par, también de RN, el diputado Tomás Fuentes, sostuvo que posponer las elecciones «es un tremendo error». «Las pudieron hacer El Salvador, Ecuador y este mismo 11 de abril 120 mil peruanos en Chile podrán ir a votar en las elecciones de dicho país». Según Fuentes, «no es posible que hoy -a 13 días de nuestro proceso electoral- nos demos cuenta que no están las condiciones sanitarias para ir a votar. El Gobierno debió haber previsto la situación y haber preparado un sistema de votación seguro. Ayer, junto a un grupo de analistas electorales, propusimos medidas en base a la experiencia internacional, pero al parecer no fuimos escuchados».
«Vamos a analizar la propuesta del Gobierno, pensando siempre en criterio sanitario. Pero al mismo tiempo tratando de resguardar los intereses de nuestra institucionalidad democrática y electoral afectada por la negligencia de este Gobierno que fue incapaz de garantizar el control de la pandemia a tiempo para evitar la situación crítica en la que estamos en pleno proceso electoral», agregó el jefe de la bancada del PPD, diputado Raúl Soto, por el aplazamiento de las elecciones. «Hay responsabilidad del Gobierno acá y van a tener que hacerse cargo de esta situación», añadió.
El presidente de la DC, Fuad Chahin, también reaccionó a la noticia y criticó que fue «justamente la total despreocupación del Gobierno por la salud y la vida de las personas la que nos llevó a este momento crítico de la pandemia». El timonel de la falange lamentó que el aumento de contagios «nos golpea justo en la fecha en que estaban planificadas las elecciones». E indicó que «nos parece que hay que tener criterios claros, sanitarios y científicos, que nos garantice que en la fecha propuesta se van a poder realizar las elecciones».
«No nos oponemos a priori. Pero tenemos que tener certeza que el 15 y 16 de mayo vamos a tener las condiciones para poder realizar las elecciones. Además esto tiene que ir acompañado de medidas mucho más potentes desde el punto de vista de control de la pandemia y medidas económicas para que la gente pueda cumplirlas. Esta no puede ser una medida aislada. Vamos a analizar el proyecto. Ver si están las condiciones en esa fecha. Y queremos hacerlo con criterio científico y no con criterio político», sentenció.