La politóloga y excandidata a constituyente, coincide en que la alianza PS-DC, que ha existido hace más de 30 años, está viviendo sus horas decisivas y que si «se hace una lectura adecuada de lo que pasó el fin de semana», el resultado más probable sería el «quiebre de este pacto político». En lo que podría ser el fin de una era, la cientista política opina que Yasna Provoste podría jugar un rol decisivo en el curso de estas horas para salvar dicha alianza, pero al mismo tiempo señala que la complejidad del momento supera las condiciones personales de la senadora por Atacama. «Ella concita mucho apoyo de manera transversal, pero sigue siendo democratacristiana, y ese punto es clave, independiente del perfil que ella tenga», analiza. Con la bajada de Pablo Vidal, de Nuevo Trato, y de Heraldo Muñoz, del PPD, en favor de la candidata PS, Paula Narváez, la gran pregunta a dilucidar -enfatiza Carolina Garrido- «es qué hace la DC».
