Secretaría técnica del Gobierno no da el ancho: sesión de la Convención se levanta por no tener condiciones mínimas para operar

En un bochorno terminó la primera jornada de la Convención Constitucional citada en el ex Congreso: la sesión convocada para las 15 horas finalmente no pudo concretarse y tuvo que ser reprogramada hasta mañana, por una serie de problemas de aforo e inconvenientes técnicos.

Mientras la derecha apuntó a la mesa compuesta por Elisa Loncon y Jaime Bassa, desde los otros grupos responsabilizaron al Gobierno, que debía haber generado las condiciones para que se concretara esta sesión.

Desde la oposición cuestionaron duramente a Francisco Encina, el funcionario de la Segpres y secretario ejecutivo de la unidad de Secretaría Administrativa de la Convención Constituyente, quien nuevamente está en el ojo del huracán.

“La sesión no se pudo iniciar por la incompetencia del señor Encina”, acusó la constituyente del PC Bárbara Sepúlveda, mientras el abogado magallánico Mauricio Daza (independiente) sostuvo que “esto es realmente impresentable y es responsabilidad, en conformidad de la ley, del Gobierno y la Segpres”.

El problema principal radicó en que no estaban las condiciones sanitarias de aforo para poder sesionar los 155 convencionales en el salón del ex Congreso. Y las 3 salas paralelas habilitadas no tenían el equipamiento necesario para reunirse.

“Llegamos y no estaba habilitado el sistema para poder tener reuniones en salas separadas por razones de aforo. No había ni siquiera micrófonos habilitados de una sala a otra”, acusó por su parte el abogado Fernando Atria (independiente Apruebo Dignidad).

Desde la Lista del Pueblo, Manuel Woldarsky acusó que “tratamos de resolver cosas administrativas (audio, micrófonos, cámaras y pantallas)”, siendo que “el Gobierno tuvo todo el tiempo para hacerlo”. “Es difícil trabajar cuando no quieren ayudar”, añadió

A esto se sumó que no hubo acuerdo en cómo se repartirían en las salas. Mientras algunos planteaban separarse por sorteo, otros plantearon agruparse por grupos políticos, pero no salió humo blanco.

En la derecha en tanto, los dardos apuntaban hacia la mesa directiva. “En estos momentos estamos viendo una improvisación increíble de la presidencia y vicepresidencia de la CC. Nos citaron a una sesión que no se puede realizar… condiciones sanitarias y técnicas impresentables. Y para colmo, a puertas cerradas (sin transparencia)”, acusó vía redes sociales Ruggero Cozzi, constituyente por RN.

A la salida, reiteró sus acusaciones ante los medios, mientras Jorge Baradit (independiente en cupo PS)  le espetó que  “Falta a la verdad, acusar a la mesa es improcedente”, optando por lanzar sus dardos hacia el “funcionario que gana más de siete millones de pesos” en alusión a Encina.

En esta primera sesión estaba previsto abordar  la declaración sobre los detenidos del estallido social, que ya ha causado roces dado el tajante rechazo de los convencionales de Chile Vamos a la propuesta, además de la idea de ampliar la mesa directiva a hasta siete integrantes. Todos estos tópicos deberán ser abordados mañana, a contar de las 10 de la mañana, hora en que fue reprogramada la primera sesión del organismo.