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«Aquí hay un proceso opaco, en el sentido de que podemos conocer las formalidades desde el punto de vista más bien legal, la licitación, pero evidentemente, los intereses que hay detrás, parecen estar dando la sospecha», comentó el analista político, en conversación con El Mostrador en La Clave, aludiendo a la licitación del elemento químico que fue adjudicada a las empresas BYD Chile SpA (de capitales chinos) y Servicios y Operaciones Mineras del Norte S.A. (chilena, ligada al Grupo Errázuriz). El académico también abordó la reunión entre el equipo del Mandatario electo, Gabriel Boric, con el biministro Juan Carlos Jobet, realizada el 5 de enero. Para el analista, «esa puesta en escena termina llevando al Gobierno electo a verse involucrado de alguna manera en esta decisión».
El doctor en ciencia política y director de la Escuela de Gobierno y Comunicaciones de la Universidad Central, Marco Moreno, afirmó que hay «cierta opacidad» en la licitación del litio, adjudicada el miércoles a las empresas BYD Chile SpA (de capitales chinos) y Servicios y Operaciones Mineras del Norte S.A. (chilena, ligada al Grupo Errázuriz).
“Cada una se adjudicó una cuota de 80.000 toneladas de litio metálico comercializable (LME), por las cuales BYD Chile SpA presentó una oferta por US$61 millones y Servicios y Operaciones Mineras del Norte S.A. ofertó US$60 millones, respectivamente”, señaló el Ministerio de Minería en un comunicado.
«Que se haya adelantado la licitación misma, sorprende (…) Las razones por cuales se adelantó dos días el proceso mismo, también es un hecho que hay que tener en consideración», dijo Marco Moreno a El Mostrador en La Clave.
«Aquí hay un proceso opaco, en el sentido de que sí podemos conocer las formalidades desde el punto de vista más bien legal, la licitación, pero evidentemente, los intereses que hay detrás, parecen estar dando a la sospecha», añadió el analista político.
El doctor en ciencia política expresó que la reunión -realizada el 5 de enero- que sostuvieron integrantes del equipo del Presidente electo Gabriel Boric con el biminstro de Minería y Energía, Juan Carlos Jobet, «enredó» a la futura administración.
«Hay una cierta opacidad en todo este proceso. Son cinco cuotas, se adjudicaron dos, eso podría dar pie para que el Gobierno entrante o los asesores que se reunieron con el biministro Jobet para abordar el proceso de licitación hace unos días atrás, Izkia Siches, Diego Pardow y Willy Kracht, coordinador de minería del comando, se haya instalado esta idea de que haya una suerte de empate», añadió el analista político.
«Pareciera que no todo el equipo del Gobierno electo no está totalmente en contra. Esa es la idea que ronda porque algunos lo ven de alguna manera positiva, otros son tan críticos del proceso, eso es lo que hace de esto que se de esta opacidad que no le hace bien a una decisión de política pública», enfatizó.
«Esa puesta en escena termina llevando al Gobierno electo a verse involucrado de alguna manera en esta decisión», reiteró.
«Sin embargo», dijo Marco Moreno, Boric «consideró que si bien esta era una atribución del Poder Ejecutivo, no la compartía, por lo tanto desinstalaba la sospecha, y abre el espacio para la judicialización del proceso».
Recordemos que Gabriel Boric, tras la adjudicación de la licitación, comentó que «es una mala noticia para Chile» y que «recuerda a esas leyes de amarre que se hacían a última hora cuando un Gobierno ya está dejando sus funciones”.
«Le parece a él (Boric) y a su Gobierno una mala noticia. Sin embargo estuvieron sentados en la mesa, hay allí algunas disputas internas respecto del proceso de licitación, por lo tanto Sebastián Piñera logra enredar al Gobierno electo en esta decisión», apuntó el director de la Escuela de Gobierno y Comunicaciones de la Universidad Central.
