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Senado aprobó rebaja de quórums para la aprobación, modificación o derogación de leyes orgánicas de actual Constitución PAÍS

Senado aprobó rebaja de quórums para la aprobación, modificación o derogación de leyes orgánicas de actual Constitución

La iniciativa —que ahora pasa a la Cámara a segundo trámite constitucional— plantea que dichas normas sean aprobadas o modificadas con el quórum de mayoría absoluta de los diputados y senadores en ejercicio y no con los 4/7 que actualmente se necesitan. El senador Pedro Araya sostuvo que «hemos luchado incansablemente por abrir los candados y cerrojos que hasta ahora existen en la constitución política que nos rige, particularmente los quórum supra mayoritarios que le han otorgado un poder de veto a la derecha». En tanto, su par del PS Álvaro Elizalde afirmó que «esta es una moción democratizadora que refuerza un principio que es que existiendo mayorías las normas se pueden modificar». Por su parte, el senador republicano Rojo Edwards planteó que «los quórum muy altos son una traba, pero la ausencia de quórum también desproteger a los chilenos de sus derechos y libertades ante los deseos de poder de la burocracia o de las mayorías circunstanciales». Desde la UDI, Juan Antonio Coloma, coincidió con sus colegas y manifestó que «los países no solo necesitan velocidad de cambios, sino que también estabilidad de reglas».


Con 42 votos a favor, 2 en contra y 1 abstención la Sala del Senado aprobó eliminar la existencia de quórums supra mayoritarios para la aprobación, modificación o derogación de las normas legales que tienen carácter de Ley Orgánica Constitucional.

La iniciativa plantea que dichas normas sean aprobadas o modificadas con el quórum de mayoría absoluta de los diputados y senadores en ejercicio y no con los 4/7 que actualmente se necesitan.

El proyecto, que ahora deberá cumplir su segundo trámite en la Cámara de Diputados, tuvo su origen en una moción de los senadores del PS Juan Luis Castro, Álvaro Elizalde, Fidel Espinoza, José Miguel Insulza y Gastón Saavedra; y en otra iniciativa de los senadores Pedro Araya (Ind.), Ricardo Lagos (PPD), Ximena Órdenes (PPD) y Jaime Quintana (PS).

Previo a la votación se dio cuenta de la presentación de dos indicaciones por parte del senador Rojo Edwards (Partido Republicano) y Juan Antonio Coloma (UDI), respectivamente.

La primera señalaba que para aprobar, modificar o derogar leyes del Banco Central, del Congreso, del Tribunal Calificador del Elecciones, de la Contraloría y leyes de organización y atribuciones de los tribunales, se requerían las 4/7 partes de los parlamentarios en ejercicio. La indicación fue rechazada, por no alcanzar los votos necesarios, con 4 a favor, 16 en contra y 19 abstenciones.

La segunda indicación plantea que para aprobar, modificar o derogar las leyes sobre votaciones populares y escrutinios, la del Congreso, las de la Contraloría y el Banco Central, y las de atribución de los tribunales se requeriría de un quórum de 83 diputados y 27 senadores en ejercicio. Dicha propuesta fue rechazada, por no alcanzar los votos requeridos, con 24 sufragios a favor, 14 en contra y 3 abstenciones.

Tras el debate, los senadores Pedro Araya y Rodrigo Galilea presentaron dos indicaciones más que buscaban establecer una excepción a la ley de la Contraloría y la del Banco Central, estableciendo un quorum de 4/7 para su modificación. Ambas fueron rechazadas, por no alcanzar el quórum requerido, con 24 votos a favor, 16 en contra y 1 abstención.

Fue el presidente de la Comisión de Constitución, senador Matías Walker (DC) quien explicó los principales alcances del proyecto. «Quiero invitar a rechazar las indicaciones que se han presentado para establecer excepciones a esta rebaja… fue la junta de gobierno la que modificó el criterio y se dejó inexplicablemente en 4/7 este quórum…es una rareza, algo extraño al ordenamiento jurídico este quórum», señaló el legislador.

El senador Araya sostuvo que «hemos luchado incansablemente por abrir los candados y cerrojos que hasta ahora existen en la constitución política que nos rige, particularmente los quórum supra mayoritarios que le han otorgado un poder de veto a la derecha».

En tanto, Álvaro Elizalde afirmó que «esta es una moción democratizadora que refuerza un principio que es que existiendo mayorías las normas se pueden modificar…el principio básico es reestablecer el principio de la soberanía popular…se eliminan las leyes de quórum supra mayoritario de 4/7 pero se va a requerir un quórum mayoritario, de mayoría absoluta».

El senador Rojo Edwards también tuvo palabras para la iniciativa aprobada: «Los quórum muy altos son una traba, pero la ausencia de quórum también desproteger a los chilenos de sus derechos y libertades ante los deseos de poder de la burocracia o de las mayorías circunstanciales…por eso lo que se requiere son quórums razonables en aspectos importantes».

Desde la UDI, Juan Antonio Coloma manifestó que «hay que hacer una armonía adecuada, hay que buscar estabilidad con velocidad…los países no solo necesitan velocidad de cambios, sino que también estabilidad de reglas. Hoy hay 14 leyes de quorum constitucionales, pero hay 4 tremas que a mi juicio necesitan un contrapeso y por eso presenté mi indicación».

El senador de RD Juan Ignacio Latorre aseguró que «existe un consenso sobre la necesidad de modificar el quórum exigido para modificar las LOC … los sectores conservadores que van por el rechazo quieren partir de cero un proceso constituyente, postergar y ahora si tener capacidad de control y poder de veto».

Asimismo, Lagos Weber valoró los cambios de opinión e invitó a sus colegas «a evaluar si es que, tal vez, esta misma disposición hubiera existido antes, tal vez nos habríamos evitado desencuentros más profundos… este es un paso importante, soy de los optimistas del apruebo y hacer el ejercicio hoy de esta reforma tiene un valor».

Finalmente el senador Jaime Quintana sentenció que «este cambio es del todo normal en cualquier democracia. (…) Tenemos que ser consistentes y coherentes cuando decimos que no nos gustan los cerrojos. Si se aprueba este proyecto, se cae una parte sustancial de la Constitución del 80, para construir futuro. Acá la política tiene su expresión y nos obliga a buscar los mejores acuerdos».

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