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Crédito: YouTube Escuela Nacional Sindical
El gremio denunció que Nicole Kramm, quien fue arrollada por una tanqueta en la frontera colombo-venezolana el pasado 23 de febrero, no ha recibido ninguna ayuda del consulado. «Señor Presidente, le exigimos comprometer hoy todas las gestiones diplomáticas y legales necesarias para que Nicole vuelva al país íntegra y sana», señala la misiva entregada por Unión de Reporteros Gráficos y Camarógrafos de Chile en La Moneda.
La Unión de Reporteros Gráficos y Camarógrafos de Chile pidió al Gobierno del Presidente Sebastián Piñera que inicie gestiones diplomáticas para asegurar la atención médica a la fotógrafa chilena Nicole Kramm, quien fue arrollada por una tanqueta en la frontera colombo-venezolana el pasado 23 de febrero.
Kramm cubría la llegada humanitaria con destino a Venezuela en el puente Simón Bolívar en Cúcuta (Colombia), cuando fue atropellada por una tanqueta militar de la Guardia Nacional Bolivariana, usada –según las versiones- por militares venezolanos que desertaron.
Ese mismo el mandatario chileno se encontraba en la zona junto a su homólogo de Colombia, Iván Duque, y el autoproclamado presidente encargado de Venezuela, Juan Guaidó, para la frustrada entregada de la ayuda humanitaria.
En una carta entregada al Ejecutivo, en el Palacio de La Moneda, la Unión de Reporteros Gráficos y Camarógrafos de Chile indica que «es indispensable» que las autoridades chilenas «soliciten investigar y que se aclaren las circunstancias en que Nicole Kramm fue violentamente agredida, en medio del conflicto en la frontera, junto a un grupo de personas y otros profesionales».
«Señor Presidente, los fotoperiodistas de Chile y la comunidad periodística de nuestro país le exigimos comprometer hoy todas las gestiones diplomáticas y legales necesarias para que Nicole vuelva al país íntegra y sana», señala la misiva.
En la carta se explica que la profesional está mal de salud, física y psicológicamente «con una pierna que empeora cada día», sin acceso a antibióticos por el estado de excepción que se vive en Venezuela y acusan que el Gobierno de Chile «la tiene en el más absoluto abandono».
Sostienen que la joven profesional estuvo alojada en una casa particular donde fue acogida, en la ciudad de Táchira, a más de 800 kilómetros de Caracas, sin locomoción ni posibilidad de trasladarse al consulado, situado en la capital de Venezuela.
La Unión de Reporteros Gráficos y Camarógrafos reveló además que el consulado no le ha ofrecido ninguna ayuda médica, ni ambulancia para ser trasladada a un recinto asistencial, ni nada que la ayude a mejorar su salud física y menos del estado de shock en que quedó.
“Toda la ayuda que ha recibido después de que casi murió tras el atentado contra su vida son US$20, depositados en la cuenta de un tercero, el periodista Leonel Retamal, que obviamente no tiene como entregarle nada, porque no hay cajeros donde girar desde una cuenta bancaria, y lo único que pudo hacer cuando la vio, días atrás, fue pagarle un almuerzo con su tarjeta bancaria”, indica Víctor Salas, presidente del gremio.
Ante la emergencia de salud de la fotógrafa chilena, funcionarios militares de Venezuela la trasladaron este miércoles 6 de marzo en un avión militar hasta el aeropuerto de La Carlota, en Caracas, y la pusieron en manos de especialistas, según explican en la misiva.
«Allí la trataron hasta altas horas de la madrugada y los médicos le sugirieron internarse para supervisar la avanzada infección y administrar antibióticos vía intravenosa», añadieron.
