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El edil se mostró de acuerdo con la instauración de un sector especial para el comercio sexual en la comuna. Admitió que la prostitución «nunca la vamos a eliminar» ya que es «la profesión más antigua». Sin embargo, a su juicio, el «barrio rojo es como el vertedero o el relleno sanitario, nadie lo quiere», sostuvo.
El alcalde de Santiago, Felipe Alessandri (RN), afirmó que es partidario de instalar un “barrio rojo” en la comuna; con el objetivo de buscar una mayor regulación de la prostitución.
En entrevista con Radio Universo, el jefe comunal dijo que esa es una de las ideas que maneja para abordar esta problemática. Alessandri indicó que si bien en el último tiempo se ha logrado disminuir su ejercicio mediante la instalación de comercios familiares en zonas donde se practicaba la prostitución, eso no ha sido suficiente para erradicarla.
«La prostitución es un foco que existe. Debajo de mi oficina hay prostitución», dijo.
“Cuando ponemos restoranes y cuando vienen turistas la prostitución comienza a trasladarse. Nunca la vamos a eliminar, esta es la profesión más antigua. La sacamos de San Antonio con cámaras… pero están todo el día, desde las 8 de la mañana”, agregó el jefe comunal.
“Hay que recordar que la prostitución no es un delito, es estar parado en la calle, y podemos fiscalizar por un tema sanitario“, explicó, y señaló que la policía “no puede hacer nada frente a una niña que se para en la calle mientras no ejerza el acto sexual”.
Al mismo tiempo, Alessandri señaló que la creación de un «barrio rojo», es decir un sector especial para el comercio sexual, fue una propuesta que presentó cuando era concejal, pero que es complicado definir el lugar dentro de la comuna.
“El barrio rojo es como el vertedero o el relleno sanitario, nadie lo quiere pero todos dicen que es necesario. Yo soy partidario, ¿pero dónde lo instalamos? Nadie lo quiere“, expresó.
