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La empresa quedó sin autorización para operar los cerca de 30 buses que tiene registrados.
A raíz del nuevo accidente que protagonizó un bus de la empresa Línea Azul, que dejó 6 personas fallecidas, el Ministerio de Transportes canceló los permisos de operatividad de todas las máquinas de la compañía, las que presentaban graves irregularidades.
Al respecto, la seremi de Transportes de Ñuble, Bárbara Kopplin, informó en Chillán que se inició un proceso administrativo a la empresa. Debido a esto, Línea Azul quedó sin autorización para operar los cerca de 30 buses que tiene registrados.
Sobre la máquina que se volcó el pasado lunes, no debía estar operando, afirmó el fiscal regional subrogante, Javier Von Bishoffshaussen, ya que tenía su placa patente adulterada: el bus tenía el documento de una máquina que cuenta con prohibición de circular desde 2016 y que estaba de baja en Chillán.
Además, durante las últimas horas y en el marco de la investigación penal que lleva la Fiscalía de Graneros, se realizaron allanamientos a los talleres de la empresa en Santiago, Rancagua y Chillán, donde se constataron las irregularidades.
Tras ser anunciada del proceso administrativo, Línea Azul tendrá entonces cinco días para presentar sus descargos.
Mientras tanto, el conductor del bus, Edison Aedo Recabal, quedó con arresto domiciliario total y arraigo nacional. La Fiscalía lo formalizó por cuasidelito de homicidio.
La Fiscalía acusa que Aedo circulaba a exceso de velocidad y con los sensores desconectados. Además, el bus habría presentado fallas mecánicas en la barra de dirección, lo que sería la principal causa del accidente.
Por su parte, el conductor negó haber manejado sobre los límites de velocidad permitidos, narró parte del accidente y ofreció disculpas a las familias de las víctimas.
“De repente partió sola para un lado. Fue todo tan rápido todo. A los familiares, mil disculpas, Dios sabe que yo hice todo lo posible para que no le pasara nada a nadie”, aseguró.
