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Las autoridades locales confirmaron que, por el momento, «se desconoce» el impacto de esta nueva contaminación en Ancud. Desde la empresa confirmaron los hechos y explicaron que la única alternativa que tenían era derivar los desechos al mar.
Hace casi dos meses, la comuna de Ancud, en la región de Los Lagos, sufrió el derrame de aguas servidas. En aquella ocasión, la empresa apuntada como responsable, Essal -la misma de la crisis sanitaria en Osorno- indicó que se produjo un vertimiento que se mezcló con las aguas de un canal que escurre hacia una playa; problema que se prolongó durante más de una hora.
Ahora, la comuna de la isla de Chiloé es nuevamente afectada. Esta vez, fue una rotura de una tubería, la que generó durante este martes un escurrimiento de aguas servidas frente a la capitanía de puerto de la comuna; agua con materia contaminante que llegó hasta la bahía.
Las autoridades locales confirmaron que, por el momento, «se desconoce» el impacto de esta nueva contaminación en Ancud. Asimismo, Essal tendrá que utilizar una cámara especializada para ubicar el punto de rotura, que se emplaza bajo la losa de la costanera, que fue recientemente remodelada.
Por su parte, la Superintendencia de Servicios Sanitarios (SISS) aseguró mediante su cuenta de Twitter que se encuentran “en terreno fiscalizando las medidas de mitigación y trabajos que se encuentra desarrollando Essal tras la rotura de la impulsión en la Planta Elevadora de Aguas Servidas Prat de Ancud”.
En conversación con radio Bío Bío, el gerente de Operaciones de Essal, Andrés Duarte, confirmó que la empresa efectivamente estaba vertiendo aguas servidas al mar, del orden de 20 a 30 litros por segundo, aunque intentó bajarle el perfil al asunto.
“Esto es una situación totalmente anormal. Una situación como esta no nos ocurría… registros anteriores hasta el año 2000″, sostuvo.
“Hay algo que nos llama la atención, que una tubería de este material (PVC) que es tan seguro haya tenido esta rotura imprevista y, bueno, nos cabe hacer una investigación sobre qué puede haber ocurrido”, dijo Duarte.
Según Duarte, «lo que sufrimos fue la rotura de una tubería que es conocida como la tubería de impulsión, que conduce las aguas desde las plantas elevadoras hacia otras plantas reelevadoras, que las envían a la planta de tratamiento, o sea, es una rotura de una tubería de PVC y eso nos impide seguir impulsando”.
En esa línea, Duarte comentó que la única opción que le queda a Essal ante esta emergencia es derivar los desechos al mar de manera directa.
