PAÍS
«¿Cómo se planea trazar los contactos de alguien infectado que fue a comprar a un centro comercial?», es la pregunta que plantea el centro de estudios.
Un nuevo informe de Espacio Público planteó dudas respecto a lo que sería la estrategia de testeo, trazabilidad y aislamiento (TTA) de una persona contagiada con covid-19 que va a un centro comercial.
En la investigación realizada por Camila Arroyo, Tomás Cortés, Eduardo Engel, Diego Pardow y Pablo Simonetti, el centro de estudios planteó la siguiente interrogante: «¿Cómo se planea trazar los contactos de alguien infectado
que fue a comprar a un centro comercial?».
Agregan que «es la misma duda que mantenemos respecto de la trazabilidad en el transporte público. ¿Cómo se
piensa trazar los contactos de alguien infectado que tomó el metro?».
En ese sentido, proponen que el uso limitado de información de los teléfonos celulares permitiría realizar este trabajo, para lo cual se debe desarrollar un marco legal que lo permita y regule.
«En cuanto a los empleados que puedan estar contagiados, creemos que las empresas comerciales (como todas las
demás) deben hacerse parte del esfuerzo de detección activa de casos, testeo y trazabilidad. No solo recomendaciones, como las planteadas en el Paso a Paso Laboral, sino un sistema obligatorio que permita detectar
y aislar tempranamente a posibles empleados contagiados, a sus contactos estrechos y eventualmente a los clientes que hayan interactuado con él y cuyo registro está en las boletas», agregan.
«Sin estas estrategias de TTA, más las ya conocidas respecto de aforo, demarcación y empleados que vengan
solamente de las comunas desconfinadas, la posibilidad de la apertura de los centros comerciales durante la etapa de transición nos parece un riesgo innecesario», considera Espacio Público.
El centro de estudios puso el ejemplo de Colombia, país que entre junio y julio anunció tres viernes en que las compras estarían exentas de IVA. » Las aglomeraciones que se produjeron en los centros comerciales el 19 de junio y 3 de julio a causa de esta iniciativa redundaron en un incremento importante en los nuevos contagios y a la cancelación del tercer día libre de IVA, que iba a ser el 17 de julio».
A partir de allí, «los contagios en Colombia iniciaron un ascenso sostenido que no se ha podido detener luego de estas experiencias, pasando de 1600 contagios diarios a mediados de junio a más de 10 mil a comienzos de agosto; los decesos por Covid-19 se quintuplicaron durante el mismo período».
Finalmente, sostienen que «esta experiencia debiera tenerse muy presente para tomar todas las precauciones necesarias antes de reabrir los centros comerciales en Chile».
