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Adriana Muñoz (PPD) lamentó la postura del Gobierno frente a la idea de instaurar el voto domiciliario para que las personas contagiadas de covid puedan participar en el plebiscito de octubre y confirmó que la oposición estudiará una reforma constitucional para poner el foco sobre el tema.
La presidenta del Senado, Adriana Muñoz, dijo que la respuesta del Gobierno fue tardía, frente a qué pasará con el voto de las personas que son casos positivos de Covid-19 en el plebiscito del próximo 25 de octubre. La titular de la Cámara Alta criticó, además, que recién en julio el Ejecutivo diera algunas señales al respecto.
«Con el diputado Paulsen (RN) hemos estado disponibles rápidamente a aprobar una ley que permita el voto a domicilio, esto es un portazo a la ciudadanía para que ejerza sus derechos políticos. Nosotros resguardamos el derecho a la salud, a la vida, pero también hay que resguardar los derechos esenciales como ir a votar», dijo Muñoz en conversación con Radio Universo.
Para la timonel del Senado, el Gobierno le ha dado un portazo a las personas que están contagiadas y aseguró que hay fórmulas. «Si no existieran fórmulas, muy bien, pero existen las fórmulas del voto a domicilio y si el Gobierno se niega, vamos a tener una situación bastante discriminatoria con muchos compatriotas que son víctimas de contagio», añadió.
Adriana Muñoz, militante del PPD, dijo a la radio que, en consecuencia, como oposición, «tendremos que explorar si se puede a través de una reforma Constitucional elaborar este proyecto, si es posible la vamos a explorar y creo que es una buena alternativa de entregar esta posibilidad de voto a las personas contagiadas».
«Estamos conversando las alternativas, estudiando si esto es posible, si es posible enmarcar esas posibilidades de voto en una reforma constitucional, que sería la única alternativa», agregó haciendo alusión a la propuesta del senador Guido Girardi (PPD), quien anunció el envío de un proyecto para garantizar que los contagiados de coronavirus puedan votar.
Recordemos que un verdadero balde de agua fría fue el que lanzó el ministro del Interior Víctor Pérez al cerrar la puerta al voto de personas contagiadas con COVID-19 en el próximo plebiscito constituyente del 25 de octubre. Si bien el Servicio Electoral (Servel) e incluso el presidente RN de la Cámara de Diputados, Diego Paulsen, habían señalado durante la mañana que había espacio para legislar sobre la materia, La Moneda descartó la posibilidad.
