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Crédito: ATON
El hecho denunciado es la venta de armamento particular, pertenecientes a Alejandro Sanhueza Arestizábal y Sergio Solís, respectivamente quienes vendieron sus pistolas particulares sin hacer el traspaso correspondiente, no denunciarlas como perdidas y que terminaron en manos de delincuentes.
El Consejo de Defensa del Estado interpuso una querella ante el Cuarto Juzgado de Garantía de Santiago por el delito de tráfico ilícito de armas en contra de un cabo activo del Ejército y otro en retiro.
El hecho denunciado, según reporta radio Bío Bío, es la venta de armamento particular, pertenecientes a Alejandro Sanhueza Arestizábal y Sergio Solís, respectivamente quienes vendieron sus pistolas particulares sin hacer el traspaso correspondiente, no denunciarlas como perdidas y que terminaron en manos de delincuentes.
En el caso de Sanhueza, se trata de una pistola calibre Taurus 7.65 mm por $180 mil. Dicha pistola fue encontrada en noviembre del 2018 por Carabineros de Santa Cruz, durante un operativo por un robo con intimidación.
Sanhueza fue informado de la recuperación policial. Éste relató que se la había vendido a Solís, «un civil», según dicta el líbelo. El problema es que nunca se realizó el trámite de traspaso, porque la pistola seguía vinculada a su dueño original.
En las declaraciones que presentó Sanhueza se contradecían las versiones. En su primera declaración, realizada por Seguridad Militar del Ejército, dijo que después de adquirirla tomó un Uber y que el arma se le quedó en el vehículo. En la segunda, a Inteligencia, dijo que no era una compra, sino un empeño.
Después volvió a cambiar la versión: «A principios de octubre de 2018, mientras jugaba a la pelota en Peñalolén, me acerqué a un conocido, de quién sólo su nombre de pila, ‘Juan Carlos'». Solís indicó que se reunió con «Juan Carlos» en la Rotonda Grecia en la misma comuna, donde realizó la transacción sin ninguna formalidad y a cambio recibió “billetes de 20 y diez mil pesos”.
El citado medio se comunicó con el Ejército, quienes informaron que se trata de armamento particular y no material de guerra. En la actualidad, el cabo Alejandro Sanhueza sigue en funciones, mientras que Sergio Solís fue separado de las filas.
