ELECCIONES 2021
Crédito: ATON
Por su parte, Yasna Provoste insistió en que el Estado requiere una «modernización profunda». «En Chile se ha perdido la gobernabilidad, qué duda cabe -planteó- Se equivocan los que creen que la gobernabilidad y el Estado de Derecho es un tema que se resuelve solo con más carabineros en las calles o sacando a los militares a tareas de represión. Esto tiene un solo nombre: populismo», dijo. «La gobernabilidad y la paz social se construye, no se decreta”, dijo la senadora DC.
En el Encuentro Nacional del Agro (Enagro) organizado por la Sociedad Nacional de Agricultura coincidieron los candidatos presidenciales Yasna Provoste (Nuevo Pacto Social), Sebastián Sichel (Chile Podemos +) y José Antonio Kast (Partido Republicano), en una cita clave antes del debate televisivo de Anatel del próximo lunes 11 de octubre.
Ausente estuvo el candidato de Apruebo Dignidad, Gabriel Boric, quien no asistió al evento por tener actividades el Congreso, y fue blanco de los cuestionamientos de sus contendores de la derecha.
En el equipo del diputado magallánico explicaron que el segmento con presidenciales en Enagro partió casi una hora tarde, pero coincidió con el horario de votación en la Cámara.
Su inasistencia fue fustigada por el abanderado de Chile Podemos +, Sebastián Sichel, quien cuestionó que algunos postulantes a La Moneda continúen “legislando de manera «populista y recibiendo las dietas del Estado”.
«Entiendo que están cumpliendo su labor parlamentaria. Lo raro es tener una elección presidencial en que otros candidatos siguen recibiendo dietas del Estado, remuneraciones del Estado, cumpliendo labores parlamentarias y siguen presentando proyectos de ley muchas veces populistas o ejerciendo acusaciones constitucionales para obtener votos», dijo el exministro de Sebastián Piñera.
Por su parte, el candidato del Partido Republicano también fustigó a Boric, señalando que “si alguien quisiera profundizar en algunos de estos temas, está nuestra página web el programa, no lo hemos bajado, sigue ahí”.
Por su parte, Yasna Provoste insistió en que el Estado requiere una «modernización profunda». «En Chile se ha perdido la gobernabilidad, qué duda cabe -planteó- Se equivocan los que creen que la gobernabilidad y el Estado de Derecho es un tema que se resuelve solo con más carabineros en las calles o sacando a los militares a tareas de represión. Esto tiene un solo nombre: populismo», dijo.
«La gobernabilidad y la paz social se construye, no se decreta. Se ha planteado la lentitud del Estado en su propia gestión; soy una convencida, y así lo hemos planteado en nuestro programa de Gobierno, que el Estado requiere una modernización profunda. No culpemos al Estado de la ineficiencia y de la ineptitud de los que nos prometieron ‘el Gobierno de los mejores'», señaló la expresidenta del Senado.
En su intervención, Kast también pidió hacer un minuto de silencio a Hernán Allende, quien murió tras ser víctima de un atentado incendiario en Carahue, “para reivindicar lo que no hizo la Convención Constitucional”, aludiendo al homenaje que no se realizó en el órgano constituyente y que gatilló una ola de reclamos por parte de los convencionales de derecha.
Algunos plantean que yo soy algo extremo y no es así. Aplicar la ley no es extremo, perseguir a los terroristas no es extremo, y los quiero invitar a levantar la voz cada vez que se pueda, para decir que un Gobierno que no hace vigente la ley, es un Gobierno extremadamente ineficiente”, dijo.
Sichel, por su parte, planteó que “el problema de la Araucanía es que el Estado no ha sido suficientemente duro para combatir el terrorismo”. “Nuestro problema con la propiedad, el orden y el respeto con el Estado de Derecho tiene que ver que no tenemos la mayoría suficiente en el Congreso para contener ese proyecto de sociedad que gana espacio en Chile”, indicó.
Kast también cuestionó a la Convención Constitucional, organismo que también fue blanco de la crítica más temprano por parte del Presidente Sebastián Piñera quien hizo un llamado a redactar una Constitución que “debe unir un país y no dividirlo”.
Al respecto, el candidato de ultraderecha indicó que “yo, efectivamente, trabajé para que ganara el rechazo… Pero acepto la derrota democrática y esperaba que la convención hiciera bien el trabajo y nos pudiera presentar, al menos, un esbozo de lo que podría ser una buena Constitución, cosa que no ha ocurrido (…) Si el proyecto es malo y yo salgo electo Presidente, claramente trabajaré para que en el plebiscito de salida gane el rechazo».
