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Crédito: ATON
Tras la aprobación de la acusación en la Cámara, el Presidente solo tuvo actividades a puertas cerradas, y La Moneda se remitió a emitir un comunicado recalcando que se trata de una acusación improcedente, aprobada con “el mínimo de votos requeridos” y que mientras transcurra el tiempo en que el Senado revise el libelo como jurado, el Mandatario continúa en funciones y no queda suspendido.
No hubo actividades públicas ni vocería del Presidente Sebastián Piñera tras la aprobación de la acusación constitucional en su contra por el caso Dominga en la Sala de la Cámara de Diputados. El Mandatario solo tuvo actividades a puertas cerradas, y la Moneda se remitió a emitir un comunicado en donde puso todas sus fichas apostando al Senado.
La declaración oficial recalca que se trata de una acusación es improcedente, que fue aprobada con “el mínimo de votos requeridos” (78 votos a favor, 67 en contra y 3 abstenciones) y que mientras transcurra el tiempo en que el Senado revise el libelo como jurado, el Mandatario continúa en funciones y no queda suspendido, una tesis donde hay consenso político.
“El Senado cuenta con un plazo de entre 4 y 6 días para tratar la acusación. En el intertanto, el Presidente de la República continúa ejerciendo plenamente sus funciones”, señala el texto.
La declaración agrega que “como Gobierno estamos convencidos de que la decisión de una ajustada mayoría de la Cámara de Diputados que apoyó la acusación es injusta y no tiene fundamento alguno, ni en los hechos ni en derecho”.
En consecuencia, “el Gobierno de Chile espera que el Senado de la República desestime la acusación interpuesta, asegurando el traspaso del mando de un Presidente electo democráticamente al Presidente que elija la gente, como ha ocurrido siempre en Chile desde el retorno de la democracia”, finaliza el comunicado.
