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Créditos: Agencia Uno (referencial).
La secretaria de Estado defendió la política sobre seguridad del Gobierno, que aseguró tiene origen en el programa de campaña del Presidente Boric y que “a partir desde mayo del 2022 empezó a desplegar una serie de acciones”. Sin embargo, apuntó que la realidad para Carabineros y las instituciones que persiguen el delito era más delicada de lo que en el Ejecutivo pensaban al asumir la administración.
La ministra Secretaria General de Gobierno, Camila Vallejo, se refirió a la situación de Carabineros, a propósito de las muertes de tres funcionarios policiales de la institución en el último mes, y aseguró que la realidad para estos era “más precaria de lo que pensábamos”.
Vallejo apuntó al aumento de presupuesto destinado a las policías, anunciado por el Presidente Gabriel Boric luego de la muerte del cabo Palma, y expresó que “cuando uno asume el poder Ejecutivo va encontrando cosas que nadie te las contaba y eso implicó un reforzamiento mucho mayor de lo que teníamos presupuestado en nuestra agenda de seguridad”.
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En conversación con Tolerancia Cero, en CNN Chile, la autoridad señaló que la agenda de seguridad no es un tema que el Gobierno haya empezado a abordar a propósito de los hechos de violencia recientes, ya que “el Presidente de la República, ya siendo candidato, asumió un compromiso con la agenda de la seguridad, y a partir desde mayo del 2022 empezó a desplegar una serie de acciones”.
“Se ha tratado de instalar que el tema de seguridad es nuevo para el gobierno, de que hay una especie de reacción del gobierno frente a los hechos de violencia, eso está muy alejado de la realidad”, agregó Vallejo.
“Carabineros estaba en una situación más precaria de la que nosotros pensábamos, que estaba en todo sentido y por eso ha habido un fuerte incremento del presupuesto, no solo para Carabineros, sino para las instituciones que tienen que estar al día en materia de persecución del delito”, sostuvo la ministra vocera de Gobierno.
En ese sentido, la ministra reiteró su llamado a los partidos y actores políticos, entre los cuales han surgido una serie de declaraciones y críticas al manejo de la crisis: “el Presidente ha dicho algo muy claro, el crimen organizado se combate con un Estado organizado, y por eso es tan importante que aquí comprendamos que no hay una bala de plata para solucionar esto”.
“La agenda de seguridad es una agenda de derechos. Es importante que salgamos de esta disputa política-ideológica para poder enfrentarla”, complementó.
Asimismo, la secretaria de Estado comentó que “nosotros teníamos sobre la mesa la información sobre el déficit de las policías o el avance de la violencia de los delitos, el alza de los homicidios, el narcotráfico. Por ejemplo, en materia migratoria. Esto nos tocó asumir el Gobierno con una crisis en materia de migración, pero claro, en el despliegue del Gobierno hacia las fronteras de la zona norte, nos dimos cuenta que la situación era más precaria de lo que pensábamos”.
