Gastronomía
Aumento de fiscalizaciones y elaboración de una guía de buenas prácticas que «se basa en el concepto de que la entrega del delivery tiene que ser sin contacto».
La seremi de Salud Metropolitana, Paula Labra, se reunió este jueves con el intendente de la Región Metropolitana, Felipe Guevara, y la directiva de la Asociación Chilena de Gastronomía (Achiga) para coordinar los protocolos y medidas preventivas para prevenir el Covid-19 en restaurantes con venta delivery.
Según la seremi se han realizado cerca de 60 mil fiscalizaciones a restaurantes y se han abierto 260 sumarios sanitarios por incumplientos de las normas.
Por eso se seguirá fiscalizando el manejo adecuado de los alimentos, además de los permisos necesarios para los trabajadores, así como los elementos de protección personal y medidas como el lavado de manos y uso de alcohol gel y mascarillas.
«En caso de incumplimientos, se levanta acta que deriva en un sumario sanitario y que puede llegar a una multa de 1.000 UTM, es decir, 50 millones de pesos», explicó Labra.
Para el presidente de Achiga, Máximo Picallo, «la entrega de alimentación a través del delivery es una función social que pueden cumplir los restaurantes», al ser una forma «sana y segura de repartir alimentación», incluso más segura que ir a un supermercado.
Por eso elaboraron una guía de buenas prácticas en conjunto con la Cámara de Comercio de Santiago que «básicamente se basa en el concepto de que la entrega del delivery tiene que ser sin contacto».
«Tanto la compra a través de medios electrónicos, la forma de entregar, que cada alimento tiene que venir en un embalaje propio y posterior a eso una bolsa más grande, que es un elemento que debiera venir cerrado, grapado, de manera que cuando llegue a la casa la persona que recibe este delivery lo reciba sin hacer contacto con el repartidor y ojalá deseche esa bolsa y se lave las manos», sostuvo.
Por cerca de una hora estuvieron reunidos este miércoles los representantes de Achiga, con el nuevo subsecretario de Turismo, José Luis Uriarte, en una videoconferencia en la que también participó la directora nacional de Sernatur, Andrea Wolleter.
La actividad fue el primer encuentro entre la recién asumida autoridad de gobierno con el presidente de Achiga, Máximo Picallo, y la gerente general del organismo gremial, Javiera Montes.
En una cita que fue califica de “propositiva y cordial”, los representantes gremiales le expusieron al subsecretario Uriarte, la compleja crisis que está viviendo la industria gastronómica, que ha derivado en cierre de locales y serias dificultades de muchos restaurantes para mantenerse en pie y evitar despidos.
También repasaron las medidas que ha puesto en marcha el Ejecutivo para ir en ayuda de las empresas del sector, punto en que Achiga enfatizó la urgencia de enfrentar esta crisis con acciones adicionales que ha planteado el gremio, como es suspender el pago de patentes comerciales hasta que puedan volver a funcionar y de contar con fuentes de financiamiento necesarias para disponer de liquidez y sortear el complejo momento actual.
