Gastronomía
En un año donde la industria de bebestibles se ha redefinido -y potenciado- producto de la pandemia, las marcas apuestan por nuevos formatos y afianzan el trabajo de los últimos años, con nuevas cepas que se consolidan y sabores tradicionales que siguen destacando.
Aún en pandemia, la industria vitivinícola no para. El vino representa un 0,5% del producto interno bruto y emplea a más de 100,000 personas en trabajo directo, según Vinos de Chile. Y es uno de los pocos rubros que no se vio afectado en ventas.
Por eso el mercado trae nuevas cepas, cosechas y marcas. Con tintos que se disfrutan a temperaturas más heladas para compartirlos en una terraza mientras sube la temperatura o con cepas tradicionales para disfrutar con una buena carne. O nuevas variedades de espumantes para ampliar la oferta de unas de las bebidas con mayor crecimiento en los últimos años.
Un premiado Carmenere, un refrescante y frutal Sauvignon Blanc, un contundente Cabernet Sauvignon, el carácter de los vinos de autor Disidente… las nuevas cosechas de Viña TerraNoble consolidan el trabajo que el enólogo Marcelo García viene desarrollando durante los últimos años.
Y aunque son varios los que destacan, hay dos que llaman la atención. El primero es el Carmenere 2018, producto de una selección de los mejores cuarteles de los primeros viñedos plantados en 1994 en El Valle del Maule, con parras que tienen 25 años y cuya producción es de entre 6 a 7 ton/ha.
Envejecido en barricas de roble francés y fudres sin tostar, logra tonos de color rojo púrpura con matices azulados. En nariz posee una alta intensidad frutal, destacando frutas rojas y negras frescas, leves notas especiadas y menta fresca. En boca es un
vino largo, jugoso, cremoso, con taninos redondos y buen cuerpo, sobresaliendo su frescor y agradable acidez que lo hace persistente.
Ideal para acompañar un asado de tira, risotto o comidas condimentadas, servir a 16º y 18ºC.
El otro destacado es el Carignan 2018. Para muchos puede ser una cepa difícil por su acidez y marcados taninos. Sin embargo es perfecto a 12ºC para compartir en una terraza con amigos o familia.
Destaca su intenso y profundo color rojo, con aromas como guinda acida y minerales. En boca es un vino muy fresco y refrescante, con taninos losos y salvajes, muy largo y persistente en boca, ideal para maridar con lasaña de berenjenas, carnes, estofado, quesos fuertes y embutidos.
La línea de Concha y Toro, a cargo del Enólogo Marcio Ramírez, nuevamente es reconocida en la guía Descorchados 2021, la prestigiosa publicación elaborada anualmente por el periodista especializado Patricio Tapia.
Todas sus variedades -cuyo nombre homenajea a los ríos de Chile que definen los sabores de estos vinos- obtuvieron más de 90 puntos, pero destacan el Cabernet Sauvignon cosecha 2019 obtuvo 92 puntos, al igual que las variedades Syrah 2019 y la inclusión del Malbec 2019.
La obtención de estos excelentes puntajes están acompañados de un compromiso por cuidar el entorno donde se producen estos vinos, como la conservación de la flora y fauna, y una producción sustentable con el apoyo del Institute of Ecology and Biodiversity.
El Cabernet Sauvignon 2019 proviene del viñedo Palo Santo, ubicado en Marchigüe, Región de O’higgins. Con una profunda concentración de sabores, destaca los frutos rojos como frutilla y guinda, con una delicada textura y taninos suaves.
Marida muy bien con carnes rojas, incluyendo cordero, cerdo y vacuno. Además se puede degustar bien con quesos maduros y más fuertes -como los de oveja-, embutidos especiados, aceitunas, mostaza y pimienta, o con chocolates amargos con más de 70% de cacao.
En cuanto al Malbec, fiel representante de esta variedad destaca por su color oscuro rojo púrpura intenso y sus aromas sabores a frutos negros, arándanos, ciruelas y chocolate. En boca es concentrado, de taninos suaves y dulces y con cierta acidez.
Marida bien con carnes rojas asadas, preparaciones con zetas y trufas, además de verduras al wok con un toque de salsa agridulce y picante.
Tras el exitoso lanzamiento del Undurraga Brut en lata en 2019, la marca vuelve a innovar con un envase altamente reciclable.
Su nueva variedad Sweet Moscato amplía la oferta en el formato de 250cc, para consumidores jóvenes o quienes apuestan por beber con moderación.
Elaborado con uvas Moscatel y otras variedades blancas procedentes de los viñedos en el Valle Central, este vino espumoso de color dorado, con aroma floral y agradable final, es ideal como aperitivo dulce para acompañar por una entrada fría o bien con tortas y postres.
La fermentación de Undurraga Sweet Moscato se realizó en cubas de acero inoxidable a temperaturas entre 16° y 17°C, para potenciar al máximo los aromas y gustos varietales y en todo este proceso, hasta llegar al enlatado, quien estuvo supervisando todos los detalles fue el reconocido enólogo de espumantes de Undurraga, Carlos Concha.
La lata da continuidad a la incursión en nuevos envases y formatos por parte de la viña. “Lanzamos el primer espumante en lata siguiendo la tendencia mundial de acercar el vino a nuevas instancias de consumo: en la playa, en una reunión de amigos o disfrutando una tarde de la piscina, por ejemplo. La pandemia redefinió los hábitos, indudablemente, aunque se trata solamente de un cambio de contexto. Hoy vemos mucho consumo indoor y alta demanda por envases fácilmente transportables y reciclables, por eso elegimos a la lata como una manera de ofrecer distintas alternativas para llegar al público. Este tipo de productos tiene muchísima aceptación entre las nuevas generaciones que buscan bebidas refrescantes y de calidad”, explica Fernando Ananía, subgerente de Marketing y Comunicaciones.
En solo ocho años, las ventas de vino enlatado en los EE. UU. se han disparado de $2 millones a casi $200 millones. Y en Chile crece cada día más. “La lata de aluminio es el envase más reciclado del mundo, llegando al 69% de tasa de reciclaje. En Chile, la expectativa es alcanzar 55% de reciclaje con la nueva ley REP de reciclaje de envases. La lata de aluminio también es el envase más circular, ya que aproximadamente un 75% del aluminio extraído sigue siendo utilizado. De esta manera demostramos nuestro compromiso para ofrecer a toda la sociedad un envase sustentable, liviano, seguro y moderno. Nos genera mucho orgullo participar de este proyecto porque Undurraga Sweet Moscato es un producto especial e innovador en el mercado, que viene a seguir fomentando el formato para vinos y espumantes de calidad”, agregó Daniel Figueiredo, gerente comercial de Ball para Latinoamérica.
