«Efectivamente, estamos paralizados de forma indefinida, pero hoy día estamos tratando de armar una mesa (de diálogo) con la empresa», dijo este sábado a Efe el presidente del Sindicato número 1, José Vidal.
Unos 2.350 trabajadores de la Minera Escondida, perteneciente a la anglo-australiana BHP Billiton y situada en el norte, se mantenían hoy en paro tras decidir extender de forma indefinida la huelga de 24 horas que realizaron el viernes en demanda de mejoras laborales.
«Efectivamente, estamos paralizados de forma indefinida, pero hoy día estamos tratando de armar una mesa (de diálogo) con la empresa», dijo este sábado a Efe el presidente del Sindicato número 1, José Vidal.
«Nosotros no tenemos ningún problema en mantener la comunicación con la empresa. Nunca la hemos roto en realidad», puntualizó.
La compañía no se ha referido hasta el momento a la movilización en este yacimiento, situado a 3.100 metros de altitud, cerca de la ciudad de Antofagasta, en el árido desierto de Atacama.
Escondida produce cada año más de un millón de toneladas de cobre y, según cálculos privados, la paralización supone cada jornada una menor producción de unas 3.000 toneladas de cobre fino, que implican perder ingresos por valor de 30 millones de dólares diarios.
Los sindicatos critican principalmente una disminución del bono de producción, que desde octubre de 2010 ha caído desde 300.000 pesos (645 dólares) a 90.000 pesos (194 dólares) mensuales.
Por ello, demandan un bono extraordinario, llamado de año fiscal, de 5 millones de pesos (10.750 dólares) por empleado, mientras que, según medios locales, la empresa les ha ofrecido un bono de 2,8 millones de pesos (6.021 dólares).
«Luego de reunirse con un representante de relaciones laborales de la empresa sin obtener resultados favorables a las peticiones, el sindicato (…) ha decidido determinar como indefinido el paro» de 24 horas, anunció el sindicato en un comunicado.
Los empleados consideran que las ofertas de la empresa «no reflejan las astronómicas ganancias» de Escondida que, según señalan, superaron en 2010 los 4.000 millones de dólares, de los cuales 300 se destinan a remuneraciones y unos 1.000 llegan a las arcas estatales por el pago de impuestos.
El sindicato también denuncia que la compañía se niega a conceder la condición de enfermos profesionales de muchos de sus asociados y mantiene sistemas de televigilancia permanente que, a su juicio, violan su intimidad.
El paro inicial de 24 horas se extendió desde las 20.00 hora local del jueves hasta las 20.00 del viernes, y a él se adhirieron «el cien por cien» de los trabajadores, lo que provocó la paralización de todas las operaciones de la cuprífera, según las mismas fuentes.
BHP Billiton controla en Chile otros dos yacimientos, Spencer y Cerro Colorado.
En el país operan también otras grandes compañías privadas como Antofagasta Minerals, Anglo American, Kinross y Quadra Mining FNX.
Esta huelga se produce tras el paro de 24 horas que el 11 de julio protagonizaron unos 45.000 trabajadores de planta y contratistas de la estatal Codelco, la mayor productora mundial de cobre.
Esa huelga, convocada en rechazo a un plan de modernización que los trabajadores consideran el inicio de la privatización de la estatal, implicó dejar de producir alrededor de 4.900 toneladas de cobre fino y pérdidas por unos 41 millones de dólares.
En 2010, la compañía produjo 1,76 millones de toneladas, un 11 % de la producción mundial de cobre, y entregó al Estado chileno beneficios por 5.799 millones de dólares.
Chile controla en total el 30 % de las reservas mundiales y produce cada año 5,7 millones de toneladas de cobre.
