El Índice 2011 de Melbourne de Pensiones de Mercer Global determinó que el el país dejó la evaluación ‘C’, que implica riesgos importantes o defectos, pero que sigue en pie la necesidad de una reforma significativa para ayudar a los chilenos a asegurar suficientes ahorros de jubilación y de apoyo financiero a un envejecimiento de la población.
Chile está cerca de mejorar su puntuación de una ‘C’ a un grado ‘B’ en una comparación global de los sistemas de pensiones. Sin embargo, a pesar de saltar a una «C +» grado en el Índice 2011 de Melbourne de Pensiones de Mercer Global, el sistema ha mantenido su posición intermedia, destacando la necesidad de una reforma significativa para ayudar a los chilenos a asegurar suficientes ahorros de jubilación y de apoyo financiero a un envejecimiento de la población.
Según este inidicador, muchos de los sistemas de retiro del mundo están bajo un estrés significativo, incluso los sistemas de jubilación más avanzados requieren de una reforma (algunas en curso), para asegurarse de que está lo suficientemente robusto como para soportar a una población que envejece rápidamente.
El valor del índice de Chile pasó del 59,9 en 2010, a 64,9 en 2011, por encima de la puntuación media, pero no para empujar a las filas en términos de una comparación global. Países Bajos mantuvo su posición como número uno en el índice. Australia recuperó su posición como segundo en el mundo, con Suiza una vez más que conforman los tres primeros.
El estudio concluyó que no existe un sistema de pensiones de jubilación perfecta de acuerdo con el índice. Ningún país recibió una calificación de A, y 10 países recibieron una C (con riesgos importantes o defectos) o D (con mayores debilidades y omisiones). Sin embargo, este índice puede proporcionar valiosas enseñanzas y conocimientos sobre cómo los países están lidiando con los desafíos económicos y sociales del envejecimiento de la población.
