En entrevista con La Tercera, el economista Alejandro Werner también advirtió sobre el déficit de cuenta corriente de Chile y se refirió al FUT.
Alejandro Werner fue el economista mexicano que reemplazó a Nicolás Eyzaguirre como Director del Departamento del Hemisferio Occidental del Fondo Monetario Internacional (FMI) en enero de este año. Hasta entonces era titular de banca corporativa y de inversión de BBVA-Bancomer en México, donde llegó luego de haber pasado por el gobierno, donde fue Subsecretario de Hacienda y Crédito Público. Tiene un doctorado de MIT y es considerado uno de los economistas jóvenes más distinguidos del mundo. Werner sabe de lo que habla y por eso el mercado lo escucha. Ayer, en una entrevista con Negocios de La Tercera se refirió a la actual coyuntura económica de Chile y, en particular, a las propuestas educacional y tributaria de la candidata de La Nueva Mayoría, Michelle Bachelet.
«La reforma fiscal de la que se ha hablado habría que analizarla en detalle. Creo que las propuestas que se han mencionado hacen sentido, pero hasta no tener una propuesta clara en términos legislativos, es difícil ver si un cambio fiscal puede tener efectos nocivos sobre la actividad económica. Entonces, bien diseñada para financiar inversión en capital humano que tiene un retorno social muy alto, podría ser una muy buena reforma», dijo en la entrevista.
Sus palabras probablemente no sonarán bien entre los economistas –entre ellos el actual ministro de Hacienda–, que insisten en que una reforma tributaria tendría un impacto negativo en el crecimiento.
Con respecto al FUT, Werner dijo que ha tenido aspectos positivos para el desarrollo de Chile y fomentar la inversión. Pero advirtió que presenta «oportunidades de manejos fiscales agresivos que generan una reducción en la tasa efectiva de impuestos y distorsiones en las economías». Agregó que no es una práctica muy común a nivel internacional y, para hacer un análisis más completo, habría que comparar el FUT con la alternativa.
Sobre el estado actual de la economía, el economista del FMI advirtió que «hay que vigilar el déficit de cuenta corriente de Chile» e hizo una alerta de que la economía podría sufrir problemas de liquidez ante una crisis internacional, tal como ocurrió en 2008. Estima que el Banco Central tiene herramientas para enfrentarla y ve espacios para relajar las tasas en caso de una mayor desaceleración.
En la entrevista hace hincapié en destacar que la economía chilena está en buen pie y descartó que haya desequilibrios importantes. Dijo que la economía está convergiendo a «tasas de crecimiento de mediano plazo normales.»
