Por decisión unánime de directorio presidido por Óscar Landerretche
Tendrá la responsabilidad de administrar la cartera de proyectos «más desafiante del planeta» y encontrar US$ 25 mil millones para financiarlos.
Nelson Pizarro vuelve a su casa.
El ex gerente general de Chuquicamata fue elegido como el nuevo presidente ejecutivo de Codelco y ahora tendrá la responsabilidad de administrar la cartera de proyectos «más desafiante del planeta» y encontrar US$ 25 mil millones para financiarlos.
El directorio liderado por Óscar Landerretche apostó por la experiencia. La votación fue unánime.
Pizarro es reconocido como «un viejo crack» de la minería en Chile, destacando como un reconocido gestor de proyectos a lo largo de su trayectoria.
Ingeniero civil en minas de la Universidad de Chile, cuenta con más de 50 años ligados a la industria minera.
Pizarro, que ingresó a Codelco en el 90 y llegó a ocupar el cargo de gerente general de Chiquicamata y la división Andina, dejó la estatal en 1998 para unirse a las filas de Antofagasta Minerals, la minera del grupo Luksic. Después, fue también reclutado por la Joponesa Pan Pacific Copper.
Sin ir más lejos, ayer, junto al Primer Ministro de Japón, Shinzo Abe, inauguró la mina Caserones en la región de Antofagasta.
Pizarro destaca por asumir desafíos de nuevos proyectos, por lo que Codelco «jugó a lo seguro» en su opción y le envía una señal al mercado.
Tendrá la responsabilidad de administrar la cartera de proyectos «más desafiante del planeta», encontrar US$ 25 mil millones para financiarlos y asegurar que la minera se mantenga en su posición de liderazgo.
En un comunicado, Landerretche dijo que Pizarro tendrá que supervisar el mayor plan de inversión en la historia de Codelco.
La Presidenta Michelle Bachelet va a anunciar su plan para financiar la minera, a fin de que pueda llevar a cabo los proyectos necesarios que le permitan mantenerse como la mayor minera de cobre del mundo.
Codelco proyecta elevar hacia el 2025 su producción a unos dos millones de toneladas de cobre anuales, mediante nuevas inversiones.
Hasta el año 2018, la inversión proyectada suma 4.500 millones de dólares, a razón de 800 millones anuales. En 2013, la estatal chilena produjo 1,6 millones de toneladas de cobre y generó utilidades por 3.889 millones de dólares, que la firma traspasó íntegramente al fisco chileno.
