El presidente de la Bolsa de Comercio se sinceró en entrevista con La Segunda: critica que los dos últimos gobiernos quisieron «cambiar todo rápido» olvidando el largo plazo, celebra la apertura a simplificar la reforma tributaria y descarta que el congelamiento en la inversión sea exclusivamente una decisión de los empresarios.
Un fiel representante de la élite empresarial se soltó la corbata.
Juan Andrés Camus, presidente de la Bolsa de Comercio, se sinceró en una entrevista publicada esta tarde por La Segunda.
El también socio de BTG Pactual se refirió al malestar social que existe hoy en la sociedad, el que cree es el principal factor por el que el gobierno ha dado pie atrás, y le resta culpabilidad al enfriamiento en la inversión del sector privado a la ecuación.
En ese sentido, el ex Celfin explica que «los últimos 18 meses han sido de un Chile que venía bastante por el centro y de repente se fue a una orilla con mucha velocidad». Agrega que por eso el gobierno «se pegó en la cuneta y rebotó».
Explica que la ansiedad de los dos últimos gobiernos por «cambiar todo rápido» restó visión de largo plazo, lo que ha mermado la inversión.
Camus profundiza que «cuando en una economía se comienza a discutir y a cuestionar todo, aumenta el riesgo (…) y la inversión cae».
Pese a esto, se desmarcó del clásico prejuicio del empresario chileno conservador ante el nuevo escenario social: «hemos evolucionado hacia una mayor integración con el mundo (…), no a una sociedad tan rara y cerrada». En ese sentido, apunta a que la elite «definitivamente perdió poder», y añade que «mientras le poder esté más repartido, mejor».
Aclamada simpleza tributaria
El titular de la Bolsa de Santiago, que no oculta los problemas para levantar la confianza en el mercado chileno y levantar los alicaídos volúmenes tranzados en la plaza local, se refirió al golpe de Timón del nuevo ministro de Hacienda y la opción de revisar la reforma tributaria, lo que considera «una muy buena señal».
«Uno de los principales problemas que tiene la reforma tributaria es que es muy enredada», dice Camus, que agrega que «tener dos sistemas tributarios es una cosa de locos».
Eso sí, sus apuestas ya están a futuro pese a que recién el gobierno está entrando a su segundo tiempo.Cree que hay que apostar a otras discusiones, como mejorar la productividad o mejorar la calidad de la educación desde edades más tempranas.
Además, ya pone fichas a los políticos con mayor proyección para el próximo periodo: si bien muestra su admiración por la visión de futuro de Ricardo Lagos, sus apuestas son por el ministro Jorge Burgos y su habilidad para alcanzar acuerdos, y Felipe Kast (Evópoli).
