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El argumento de los minoritarios para oponerse al reordenamiento de Enersis: ponen acento en “las promesas incumplidas”

El argumento de los minoritarios para oponerse al reordenamiento de Enersis: ponen acento en “las promesas incumplidas”

Enrique Elgueta
Por : Enrique Elgueta Periodista y consultor senior en Comsulting.
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Hace tres años, la eléctrica hizo grandes promesas para contar con el apoyo de los minoritarios a su histórico aumento de capital. Sin embargo, en la todavía incipiente batalla por su spin off, las AFP no olvidan que sus compromisos no se han cumplido.


La batalla desatada por el reordenamiento de Enersis todavía está en su fase inicial. Aún falta que el directorio se defina respecto de la reorganización y que, posteriormente, llame a una junta extraordinaria de accionistas. Sin embargo, previo a que ello ocurra algunos accionistas minoritarios ya están articulando argumentos de oposición –en particular las AFP–, eventualmente para tener el apoyo necesario para frenar la compleja operación que busca dividir sus negocios entre Chile y el resto de América Latina.

Ya se pronunciaron al respecto cuando AFP Habitat y Capital solicitaron a la SVS que considere este reordenamiento como una operación entre partes relacionadas –OPR, como también le denominan algunos–, teniendo como objetivo final que sea el Comité de Directores de la empresa el que se pronuncie sobre la reorganización y, eventualmente, lo rechace.

Habiendo ratificado la Superintendencia su posición, cercanos a estas administradoras sostienen que ya se está trabajando para recurrir a Tribunales. Existe optimismo de que la Corte de Apelaciones les dará la razón, considerando algunos factores de contexto, pues no solo Habitat y Capital han insistido en ello, sino otros inversionistas de envergadura como Moneda Asset Management y expertos en regulación financiera, como Hugo Caneo, ex jefe del Área de Cumplimiento de Mercados de la SVS.

Pero, en paralelo, también se están moviendo hebras argumentales para oponerse a un negocio en el cual el beneficio para los minoritarios es difuso, si no una incógnita, y que radican en la poca credibilidad que tendría la compañía. Esto por las promesas que hizo en 2012 y sus niveles de cumplimientos.

El antecedente SEC

La empresa informó en detalle y con cifras a marzo de este año, el uso que se le ha dado al aumento de capital de 2012, la millonaria capitalización que en su minuto superó los US$8.000 millones y en la que sus controladores aportarían especies, pero que finalmente se redujo a US$6.000 millones con un aporte en dinero de los accionistas minoritarios cercano a los US$2.500 millones.

Esa información ya circula entre los accionistas minoritarios y no es un antecedente menor para este reordenamiento. Desde una AFP sostienen que, en el marco de este reordenamiento, “plantearon un plan de inversiones astronómico, pero hicieron lo mismo antes del aumento de capital de 2012. La empresa comunica una lista de inversiones para inflarla, y la vez pasada hicieron exactamente lo mismo pero hubo incumplimientos. Anunciaron para Endesa proyectos por 4 mil o 5 mil MW y están haciendo 150 MW; decían que había entre US$3.000 milllones y US$4.000 millones para comprar participaciones minoritarias, pero se gastaron muchísimo menos. Por lo tanto, qué tanto se puede confiar en su nuevo plan de inversiones cuando el anterior no se cumplió”.

La semana pasada, Endesa anunció una cartera de 36 proyectos en Chile, Perú, Colombia y Brasil, que suman 6.300 MW, sin embargo, sin ahondar en detalles –más allá de que cerca de la mitad serían en Chile–, lo que generó una serie de interrogantes.

Antes del aumento de capital de 2012, la empresa informó que dispondría de entre US$3.000 millones y US$4.000 millones para comprar participaciones en las filiales donde tenía presencia. Sin embargo, a tres años de ello sólo lo ha hecho en Coelce (Brasil) al incrementar en un 15% su propiedad por US$243 millones (alcanzando el 74,05%) y en Edegel (Perú), cuando compró por US$413 millones el 39% que poseía su sociedad controladora, Inkia Americas Holdings Limited en Generandes Perú.

También comunicó proyectos eléctricos equivalentes a 5.200 MW, sin embargo, una revisión respecto del estado de sus distintos proyectos hechos en la industria previsional concluye que de esa cifra solo se está construyendo el proyecto Los Cóndores, por 150 MW.

Punta Alcalde fue cancelado (370 MW), mientras HidroAysén se postergó indefinidamente (1.403 MW). Proyectos como Neltume y la Conversión de Taltal Quintero están en etapa de estudios o de relacionamiento con comunidades. El proyecto Curibamba (Perú) por 188 MW está en estudio de licitación.

En Brasil no se está construyendo, mientras que en Colombia** se está construyendo El Quimbo, un complejo hidroeléctrico con capacidad instalada de 400 MW, que de acuerdo a información de la empresa tiene un avance superior al 90%.

Otro ítem que prometió Enersis hace tres años fue de operaciones de fusiones y adquisiciones, argumentando que existen oportunidades que están siendo evaluadas que superan los US$6.000 millones. Sin embargo, no ha habido operaciones de este tipo.

¿Qué dice Enersis?

La empresa fue consultada por este tema y comunicó lo siguiente: “Durante 2014 se invirtió cerca de la mitad de lo recaudado con el aumento de capital. A través de Enersis se compró Edegel en Perú y Coelce en Brasil. También gracias a que se contaba con ese dinero a nivel consolidado, Endesa pudo concretar la compra de Gas Atacama. En el caso de Edegel, que es la compra de minoritarios más importante hasta la fecha, se ha revalorado enormemente desde la adquisición por parte de Enersis.

“Hasta ahora el rendimiento de estas inversiones ha sido bueno. La contribución del beneficio neto de los activos adquiridos se sitúa en torno a US$50 millones sólo en los primeros seis meses del año”.

“En el caso del capital restante, se está a la espera de buenas oportunidades. Hoy por ejemplo hay mejores precios en mercados emergentes como América Latina de lo que había hace uno o dos años”, finalizó la empresa.

**N de R: Originalmente se publicó que en Colombia no se estaba construyendo.

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