Las empresas mineras han hecho mucho por salvar su sector plagado de problemas, pero el repunte de las acciones podría haber llegado demasiado lejos, según advirtió Investec Plc.
“Los propios mineros son unos individuos muy distintos”, dijo en una entrevista con Bloomberg TV el miércoles Jeremy Wrathall, jefe de recursos naturales globales de la empresa londinense Investec. Ellos han reducido sus deudas, sus costos, sus dividendos y han hecho todo lo posible para salvarse y sanarse. Sin embargo, creemos que las cosas han llegado demasiado lejos en materia de valoraciones”.
Los precios de las acciones se recuperaron este año en medio de los aumentos del mineral de hierro y de los metales básicos, al tiempo que las autoridades chinas ponían en marcha sus estrategias para estabilizar la economía del mayor consumidor de productos básicos del mundo. Eso se extendió a empresas como Anglo American Plc y Glencore Plc, que ahora son las de mejor desempeño en el índice bursátil de referencia del Reino Unido, tras terminar el año pasado como las peores.
Glencore recortó su dividendo, vendió activos y recaudó US$2.500 millones en una venta de acciones para garantizar a los inversores que la empresa puede sobrevivir después de años de alicaídos precios en los productos básicos, los que fueron detonados por la desaceleración de China. Anglo trata de generar un cambio de tendencia vendiendo más de la mitad de sus minas y abandonando el negocio del mineral de hierro y el carbón para centrarse en sus mejores activos: los diamantes, el platino y el cobre. Otras firmas han reducido la producción de los sectores que consideran menos rentables.
Aun así, bancos como Citigroup Inc. no están convencidos. La entidad redujo su perspectiva para el sector de metales y minería a la baja desde un nivel neutral, diciendo que una recuperación en el primer trimestre había dejado demasiado elevadas las valoraciones en el corto plazo.
El índice minero FTSE 350 avanzó un 48 por ciento este año y tocó una máxima de ocho meses el miércoles. Anglo, con sede en Londres, ha subido a más del doble, mientras que Glencore, con sede en Baar, Suiza, registró un aumento del 90 por ciento.
“Se han producido cambios fundamentales en el sector”, dijo Wrathall. “Lo que se traduce en un panorama mucho mejor”.
