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Maduro recula y Venezuela vuelve a la relativa calma

Maduro recula y Venezuela vuelve a la relativa calma

El país petrolero volvió el domingo a la relativa calma luego de que su presidente echara para atrás su decisión de suprimir el billete de mayor denominación y circulación. Pese a que en algunas ciudades persistieron pequeños focos de violencia, las autoridades locales reportaron en la mayoría de los estados de país que volvieron a la calma tras dos días de intensas protestas que dejaron al menos un fallecido y unos 300 detenidos.


Tras dos días críticos por la escasez de dinero en efectivo en todo el país, Venezuela volvió el domingo a la relativa calma luego de que el presidente de ese país, el chavista Nicolás Maduro, echara para atrás su decisión de suprimir el billete de mayor denominación y circulación en esa nación.

Pese a que en algunas ciudades persistieron pequeños focos de violencia, las autoridades locales reportaron en la mayoría de los estados de país que volvieron a la calma tras dos días de intensas protestas que dejaron al menos un fallecido y unos 300 detenidos.

Desde el viernes, los venezolanos comenzaron protestas espontáneas frente a alguno comercios e instituciones bancarias exigiendo que les canjearán los billetes o les permitieran hacer las compras y que acabaron con saqueos y destrozos.

Aunado a ello, los bancos endurecieron las medidas para racionar y distribuir el efectivo a solo unos cuantos miles de bolívares por persona, y muchos cajeros electrónicos dejaron de funcionar, mientras que otros continuaban entregando billetes de 100 bolívares (equivalente a 15 centavos de dólar), pese a que ya no tenían valor.

Entonces la decisión de sacar de circulación al billete ordenada el pasado domingo y ejecutada en los siguientes cuatro días, fue revertida por Maduro a última hora del sábado, cuando se cumplían ya dos día de haber terminado el canje ante las instituciones bancarias.

Maduro explicó que «cuando uno lanza una operación de estas, debe ser como fue, sorpresiva, clara, firme, inalterable, pero también «debe tener diversas variantes que permitan que desencadene el objetivo que es la defensa de la estabilidad monetaria de pueblo de Venezuela».

La decisión de ayer «fue un viraje táctico necesario», explicó.

Su estrategia, dijo, era «golpear a las mafias, para recuperar la moneda venezolana y para encauzar la estabilidad, económica, financiera, monetaria y social de nuestro país, golpe y contragolpe».

El lunes pasado, cuando se inicio la implementación de la supresión del billete de 100 bolívares con la inspección de las bóvedas bancarias «teníamos (…) billetes de 100 solo para tres días, teníamos el 2 % del circulante de billetes de 100», dijo Maduro.

El presidente ha asegurado que mafias internacionales estaban desde hace 16 meses sacando la moneda local en billetes de 100 bolívares para dejar sin efectivo a los venezolanos y generar un caos con la moneda venezolana que en consecuencia dispararía el valor del dólar cotizado en el mercado paralelo.

Este «golpe» iba a concretarse el 16 de diciembre y «si no hubiera hecho nada yo, si me hubiera quedado paralizado yo, esta semana ellos hubieran logrado una perturbación de un alto nivel, en contra del derecho a la paz y la estabilidad del pueblo», dijo Maduro.

En este momento, y gracias a la captación de billetes hechas durante las 72 hora que los venezolanos tuvieron como plazo para depositar todos sus billetes antes de que perdieran valor, se recogieron 4.944 millones de billetes de 100 que constituyen en 80 % de la masa monetaria de billetes de esta denominación, según los número del Ejecutivo.

La salida definitiva del billete de 100 que debió cumplirse el pasado jueves debió coincidir con la entrada en circulación de una nueva familia de billetes cuyo billete de menos denominación es el de 500 bolívares (equivalente a 75 centavos de dólar), pero que nunca fueron distribuidos en las agencias bancarias.

Maduro había dicho que estos billetes no han llegado al país por «un sabotaje internacional» contra el país que ha impedido que el cargamento llegue al territorio.

«Desde hace ya 15 días comenzamos a ver extrañamente que, estando ya fabricados los billetes nuevos de Venezuela, era imposible conseguir aviones para traerlos al país», dijo para señalar algunos de los impedimentos que forman parte de ese supuesto sabotaje.

Maduro aseguró que luego de que consiguieron los aviones, estos recibieron «una llamada del Departamento del Tesoro de EE.UU. para cancelar sus vuelos».

El vicepresidente del Banco Central de Venezuela (BCV), José Khan, confirmó el domingo la llegada de un cargamento con la nueva especie monetaria de 500 bolívares proveniente de Estocolmo.

Sin embargo, el Gobierno ha indicado que la circulación de los nuevos billetes será reprogramada para cuando se tenga todo el cono monetario en el país.

Próximamente, también «van a llegar los billetes de 1.000, 2.000, 20.000, y más billetes de 500, vamos a acumular eso y cuando salgamos con eso vamos a estar completitos con todo el cono monetario», informó el mandatario venezolano.

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