“Las espinas” del paraíso sureño donde tienen casa quienes representan la mitad del PIB de Chile
Los Luksic, Solari, Calderón y un Matte están entre los empresarios con casa en el lago. También dice presente Nicolás Ibáñez, Pablo Granifo del Banco de Chile, el empresario Isidoro Quiroga y Claudio Melandri, CEO del Santander. La localidad de la región de Los Ríos se ha transformado en el nuevo reducto de descanso de los magnates chilenos. La nueva y exclusiva vecindad ha llegado a pagar $900 millones por orilla de lago, en la localidad donde, paradójicamente, más de un tercio de sus habitantes vive en una pobreza severa y en la que las reivindicaciones del pueblo Mapuche son parte del paisaje.
Panguipulli se ha transformado en el paraíso sureño, donde tiene sus casas de veraneo la mitad del PIB chileno.
Sus reservas cordilleranas, en algunas de las riberas de sus siete lagos –Riñihue, Panguipulli, Neltume, Pirihueico, Pullinque, Calafquén y Pellaifa–, han motivado el arribo de importantes hombres de negocios, quienes han convertido a esta localidad de Los Ríos en su refugio vacacional.
La paradoja está en que los más ricos de Chile viven en una de las localidades más pobres del país.
El 36,6% de los 36.000 habitantes de la comuna sufre pobreza severa y carece de necesidades básicas en el hogar, según la última encuesta Casen. Además de contar con más de un 30% de población mapuche.
No obstante, nuevos y viejos propietarios están dispuestos a cohabitar con las amenazas de ataques incendiarios, la activa comunidad mapuche Pillan Mapu, del sector Malchewe, y el reciente bloqueo a la hidroeléctrica de Endesa, en Puyinque, en demanda por la recuperación territorial y restitución del cauce de un río. Piquetes que se hacen frecuentes durante el año.
Una de las primeras familias en asentarse en Panguipulli fue la de los hermanos Sven y Wolf von Appen, quienes son conocidos por su bajo perfil, pero activa participación con la comunidad.
Ambos levantaron su residencia en la localidad de Choshuenco y, en un intento por devolver la mano a los niños más vulnerables, han mejorado la calidad de enseñanza inicial de estos, con la creación de la Fundación Educacional Choshuenco. Sin embargo, ese gesto no los hizo inmunes a las amenazas de ataques.
A través de su inquilino, el mensaje fue enviado: “Los próximos serán ellos”. Así la amenaza de un ataque incendiario fue lanzada este verano, lo que motivó que la familia “tomara sus resguardos” y “les avisara a familiares y amigos que no fueran a visitarlos”, cuenta una fuente cercana a los Von Appen.
Las investigaciones comenzaron de inmediato y, después de hacer un exhaustivo seguimiento, confirmaron que se trataba de un rumor, una amenaza sin fundamento. “Alguien lo inventó, un chiste feo o a lo mejor quisieron que pasáramos susto, pero nada más que eso”, señala un familiar.
Estos inconvenientes no han impedido que lleguen nuevos vecinos a Panguipulli. En el sector de Chauquén aterrizó Isidoro Quiroga, dueño de la empresa salmonera Australis Seafood. Con una fortuna que ronda los US$500 millones, el empresario acaba de construir una mansión en la ribera del lago Panguipulli, y habría pagado por una hectárea y media entre 27.000 y 36.000 UF. Es decir, entre más de 700 y 900 millones de pesos, según cuentan desde Chauquén.
Y es que los fundos de antiguas familias de la zona se han dividido y están siendo loteados para la venta. El precio de cada paño de tierra que se comercializa varía entre los 100 y 300 millones de pesos, dependiendo de la ubicación y si están a orilla de lago.
Así como hay una nueva camada de empresarios que está llegando a la zona, en ella también residen históricas familias que desde hace años veranean en el lugar.
El ex controlador de Lider, Nicolás Ibáñez, es uno de ellos. Tiene su casa en la península de Puyumén, ambientada al más puro estilo escocés, con una capilla y vista panorámica al lago.
El clan Luksic, también está presente. Representados por Iris Fontbona, la viuda de Andrónico Luksic Abaroa, con un patrimonio de US$10.400 millones, junto a sus hijos Paola y Jean Paul Luksic. Los dueños del holding Quiñenco y las compañías mineras en Antofagasta plc, están emplazados en la ribera sur del Panguipulli, cerca de los Von Appen.
Los “zares” del retail también cuentan con un terruño en esta comuna. Así aparece el nombre de Piero Solari, el primogénito de los dueños de Falabella, la empresa más grande de Chile, con un valor de mercado de US$26.800 millones; Eduardo Mizon, gerente general de Sodimac, y Lázaro Calderón, el controlador de Ripley, cuya empresa está valorada en US$1.230 millones.
A ellos se suman los líderes de diversas entidades financieras. El ex presidente del Santander Chile y asesor externo de la familia Botín para Latinoamérica, Mauricio Larraín, el gerente general de la entidad financiera española, Claudio Melandri, y el presidente del Banco de Chile, Pablo Granifo.
Playa Monje es otro de los sectores de la comuna donde viven adineradas familias de empresarios, como por ejemplo los hermanos del ex controlador de Sonda, Andrés Navarro.
El grupo Angelini, en tanto, está representado de cierta manera a través del gerente general de empresas Copec, Lorenzo Gazmuri, quien edificó su “segunda vivienda” en el sector de la Puntilla, en el lago Calafquén.
Máximos exponentes tiene también el sector vitivinícola, con el dueño de haras de Pirque: Eduardo Matte Rozas, con casa en Riñihue, y el controlador de las viñas Errázuriz y Chadwick, Eduardo Chadwick.
Además de los líderes de los grandes grupos económicos, en Panguipulli edificó el socio principal de la consultora PWC Chile, Luis Enrique Álamos, y el empresario y ex ministro de Economía de Piñera, Félix de Vicente. Estos importantes hombres de negocios integran la nómina de los exclusivos propietarios, en la que figuran asimismo dueños de importantes inmobiliarias, constructoras, bufetes de abogados, propietarios de hoteles, ex presidentes de gremios… ellos ya son parte de la nueva y exclusiva vecindad.
