“La economía está muy débil, el crecimiento de 2 por ciento es un dato muy malo y estamos creciendo por debajo del potencial del país”, dijo Sergio Olarte, economista de BTG Pactual, en una entrevista telefónica. “Esto va a respaldar el argumento para el ciclo de flexibilización monetaria y creo que el banco central recortará las tasas el viernes”.
La economía de Colombia creció el año pasado a su menor ritmo desde la crisis financiera mundial, al tiempo que el banco central enfrenta el dilema de reactivar el crecimiento o frenar la inflación, que está muy por encima del rango meta.
El producto interno bruto creció 2 por ciento en 2016, el más bajo desde la expansión de 1,7 por ciento registrada en 2009, después de la crisis financiera mundial. En el cuarto trimestre, la economía tuvo un desempeño levemente mejor de lo esperado, al registrar una expansión de 1,6 por ciento frente al año anterior, y de 1 por ciento respecto del tercer trimestre, pero no fue suficiente para volver optimistas a los economistas.
“La economía está muy débil, el crecimiento de 2 por ciento es un dato muy malo y estamos creciendo por debajo del potencial del país”, dijo Sergio Olarte, economista de BTG Pactual, en una entrevista telefónica. “Esto va a respaldar el argumento para el ciclo de flexibilización monetaria y creo que el banco central recortará las tasas el viernes”.
La economía colombiana se ha desacelerado desde 2013 en medio de una caída de los precios de sus principales exportaciones – petróleo, carbón y café –, en tanto la demanda interna se ha visto mermada por un descenso en la confianza de los consumidores. Al mismo tiempo, la inflación se ha mantenido por sobre la meta debido a que los costos de importación aumentaron debido a la debilidad de la moneda y los precios de los alimentos subieron durante la peor sequía en décadas.
Los encargados de política han estado divididos sobre el equilibrio entre los riesgos para la economía y la inflación. Mientras que el presidente Juan Manuel Santos y el ministro de Hacienda Mauricio Cárdenas, quien es miembro del comité de política monetaria, han instado públicamente al banco central a reducir las tasas, la junta del banco ha tenido una postura más cautelosa.
Con decisiones divididas en las últimas dos reuniones, el banco central sorprendió a los analistas con una rebaja de un cuarto de punto en diciembre, seguida de la inesperada decisión el mes pasado de mantener la tasa sin cambios en 7,5 por ciento. La próxima reunión se celebra el viernes.
La inflación anual fue de 5,47 por ciento en enero, una desaceleración desde un máximo de 16 años de 8,97 por ciento en julio, pero los economistas encuestados por el banco central aún proyectan la inflación por sobre la meta de 3 por ciento este año y el próximo.
Según las estimaciones de los analistas encuestados por Bloomberg, la economía de Colombia crecerá 2,4 por ciento en 2017, superior a los niveles de Chile, México y Brasil, pero inferior a la economía peruana.
