Grupo Luksic y Von Appen también participaron en la cumbre no oficial de la Sofofa
El encuentro partió unos 20 minutos antes de que se iniciara el foro del Consejo Empresarial Chile-Argentina y comenzó con una breve introducción de Horst Paulmann. Después se dio curso a las presentaciones. El nombre, la empresa que representaba y las inversiones que tenía en Argentina. Mientras, miembros del equipo de Macri tomaban nota de lo expuesto. El grupo congregado era potente y lo que buscaba era “tener un horizonte”, explica Óscar Guillermo Garretón. Macri vino a convencer a los empresarios chilenos a que apuesten a su país. Está en busca desesperada de inversiones que ayuden a impulsar la economía de cara a las elecciones legislativas de octubre, donde Cristina Kirchner lidera la lista de oposición y busca frenar sus reformas.
-¿Cómo le fue en la reunión con los empresarios chilenos?
-Muy bien.
-¿Qué preocupaciones le presentaron?
-Las lógicas… La estabilidad de las reglas del juego, el que vayamos equilibrando la macroeconomía…
Con esa escueta declaración a El Mostrador Mercados, el Presidente de Argentina, Mauricio Macri, coronaba su visita a Chile y daba a conocer el tenor de la pequeña cumbre que el Mandatario había sostenido a puertas cerradas con los más importantes empresarios chilenos con inversiones en el país trasandino, antes de que comenzara el concurrido foro de empresarios en la Sofofa.
¿El objetivo? Conocer los rostros de los chilenos que invertían en Argentina y conversar sobre “las cosas que nos faltan como país”, según confidenció el Jefe de Estado en su primera intervención en el foro del gremio industrial.
“Tenemos que consolidar un equilibrio macroeconómico, simplificar las normas para el sector privado, para que puedan prender y desarrollarse… bajar los impuestos para ser competitivos”, precisó.
El gobernante había llegado a Chile en una visita relámpago, en la que se reunió con la Presidenta Michelle Bachelet en La Moneda.
Por la tarde, recibió a ejecutivos y empresarios argentinos que triunfan en nuestro país. Entre ellos estaban el gerente general de Walmart Chile, Horacio Barbeito; el presidente ejecutivo de Nestlé Chile, Pablo Devoto; y el socio fundador de Linzor Capital, Carlos Ingham. Junto a ellos había un grupo de jóvenes emprendedores.
Así, en horas de la tarde del martes, aterrizó en su última escala: el auditorio de la Sofofa, para participar en el foro del Consejo Empresarial Chile-Argentina –moderado por el nuevo timonel del gremio fabril, Bernardo Larraín Matte, y el presidente de la CPC, Alfredo Moreno–, sobre la manera en que Argentina debe volver al mundo de la integración inteligente, rescatando los vínculos naturales con nuestro país, tras una relación que definió de “densa y complicada con Chile”, pero con la meta de integrar una matriz energética conjunta y dar a los chilenos acceso a energía lo más barata posible.
Pero, más allá de su mea culpa sobre el modo en que los argentinos deben capitalizar los errores del pasado y ser confiables, el ex alcalde de Buenos Aires recibía minutos antes un espaldarazo de los más importantes empresarios chilenos, quienes sostuvieron un encuentro a puertas cerradas en una salita de la Sociedad de Fomento Fabril. “Le entregamos mucho apoyo y compromiso”, indicó uno de los asistentes al encuentro.
Uno de los primeros en llegar a la reservada cita fue el controlador de Cencosud y presidente del consejo empresarial Chile-Argentina, Horst Paulmann, que, además de la fuerte presencia de su compañía, tiene fuertes vínculos personales en el país trasandino. Cabe recordar que en mayo inició el trámite de su proyecto más ambicioso, situado al norte de Buenos Aires: un centro comercial con tres torres de 14 pisos y seis condominios habitacionales, en un paño de 20 hectáreas.
En esa línea, Paulmann jugó de anfitrión, acompañando a los líderes de la Sofofa y la CPC al recibir en la puerta del Edificio de la Industria a Macri, quien de inmediato se trasladó al pequeño salón acompañado por el embajador de Argentina en Chile, José Octavio Bordón; el embajador de Chile en Argentina, José Antonio Viera-Gallo; y los ministros argentinos de RR.EE., Jorge Faurie; de Hacienda, Nicolás Dujovne; de Transporte, Guillermo Dietrich; de Energía y Minería, Juan José Aranguren, y de Asuntos Estratégicos, Fulvio Pompeo.
Las autoridades trasandinas se sumaron así al selecto grupo de empresarios que esperaban su arribo y entre los que se encontraban –además de Paulmann, Larraín Matte y Moreno–, el vicepresidente del Consejo Empresarial Chile-Argentina, Óscar Guillermo Garretón; el presidente de Ultramar, Richard Von Appen; el presidente de LarrainVial, Fernando Larraín; el gerente general de Moneda Asset Management, Antonio Gil; el CEO de la aerolínea Sky Airline, Holger Paulmann; el presidente de Lipigas, Juan Manuel Santa Cruz; el gerente general de Enaex, Juan Andrés Errázuriz; el gerente general de Falabella Financiero, Gastón Bottazzini; el director de CMPC, Bernardo Matte; la gerenta de Asuntos Legales y Corporativos de Walmart, Carmen Román; y el gerente general de Sudamericana de Vapores, Óscar Hasbún (Grupo Luksic).
Moneda Asset y LarrainVial son dos instituciones financieras que tienen los ojos puestos en cruzar la frontera y abrir oficinas en Buenos Aires el próximo año.
Tanto para Bernardo Matte, Richard von Appen y Juan Manuel Santa Cruz, la pequeña cumbre había sido todo un éxito. Otros la encontraron algo corta, pero valiosa. “Se presentaron los distintos empresarios que tienen inversiones en Argentina y manifestaron lo que están haciendo allá”, comentó el presidente de la Sofofa. “Más que preocupaciones, cada uno contó lo que eran sus inversiones y los proyectos que tenían en Argentina. Eso fue lo fundamental. Fue más bien una presentación”, agregó Garretón.
El encuentro partió unos 20 minutos antes de que se iniciara el foro y comenzó con una breve introducción del controlador de Cencosud, Horst Paulmann. Después se dio curso a las presentaciones. El nombre, la empresa que representaba y las inversiones que tenía en Argentina. Mientras, miembros del equipo de Macri tomaban nota de lo expuesto.
El grupo congregado era potente y lo que buscaba era “tener un horizonte”, explica Garretón. Ello, debido a que –según comenta– preocupan entre los empresarios las políticas de largo plazo: “Instalar una industria o una papelera con una inversión a 15 o 20 años plazo, son inversiones que requieren certezas más largas”, destacó.
El socialista, economista y consultor político, además, separó aguas entre los empresarios que participaron en la pequeña cumbre y aquellos que asistieron al foro: “La presentación (reservada) fue muy importante, porque fue un apartado de la gente que ya tenía inversiones en Argentina. Lo del foro, fue la gente que estaba interesada en Argentina”.
Si bien contó que no hubo peticiones especiales en la reunión privada, las preguntas más importantes del empresariado fueron las que se formularon en el foro que condujeron Larraín Matte y Moreno.
En ese contexto, Garretón dijo que una señal potente fue la que entregó el Mandatario trasandino respecto a la manera en que, durante este año y medio, pudo llegar a acuerdos con el peronismo no kirchnerista en materia de salir del default y otras reformas. Estas, a juicio de Macri, serían aceptadas por diversos gobernadores, quienes, a su escala, tienen necesidad de las mismas reformas para que Argentina crezca, genere empleo y aliviane la carga tributaria excesiva, que “traba todo el sistema y no permite el desarrollo”.
“Eso es una señal bien importante. El paso siguiente es que a los empresarios les convenza la manera en que él lo plantea”, precisa Óscar Guillermo Garretón.
El entusiasmo de los empresarios chilenos por Argentina se evidenció en la alta concurrencia a este foro de la Sofofa y a quienes el propio Macri hizo un guiño. “Lo más importante, y en este viaje me acompañaron gobernadores de la oposición, es que hay una mayoría de argentinos que siente que llegó la hora de cambiar y cambiar en serio. De capitalizar los errores del pasado, de que tenemos que ser previsibles, confiables y que tenemos que tener reglas del juego a largo plazo. Eso hará que se acumulen años de crecimiento y nos pondrá en un lugar distinto. La participación activa de buenos empresarios chilenos nos va a ayudar a acelerar ese proceso”, enfatizó.
Palabras que Garretón interpretó como un llamado real y potente a la inversión. “Por eso (las autoridades argentinas) son las primeras en preguntarse qué cosas están entrabando a los empresarios chilenos para invertir”, señaló.
Macri está en busca desesperada de inversiones que ayuden a impulsar la economía de cara a las elecciones legislativas de octubre, donde Cristina Kirchner lidera la lista de oposición y busca frenar sus reformas.
