MERCADOS
En un evento organizado por la Sociedad Nacional de Minería, el Mandatario aprovechó para hablar sobre la agenda del Gobierno, entre la que se encuentra la esperada reforma.
El Presidente Sebastián Piñera estuvo presente en la cena anual organizada por Sociedad Nacional de Minería, Sonami, donde hizo un repaso por las distintas iniciativas que está desarrollando el Gobierno. Una de ellas es la reforma laboral, la que el Mandatario aseguró a los presentes que «está lista».
Se espera que dicho proyecto sea enviado al Congreso durante el próximo mes de septiembre para iniciar su discusión. Destacando los aspectos positivos de sus propuestas, como es de costumbre, Piñera aseguró que esta ayudará a promover el crecimiento, la creación de buenos empleos y aumentará la inversión. «De esta forma, Chille podría convertirse en un país desarrollado y sin pobreza», se comprometió el Presidente.
En el mismo escenario, Piñera pasó por varios temas, se refirió a una próxima reforma a las pensiones que beneficiará principalmente a las mujeres, a la clase media y a los más vulnerables. Al proyecto de reforma tributaria, destacando la simplificación del sistema. Al rechazo del reajuste al salario mínimo, donde apuntó nuevamente hacia la oposición. Y a la guerra comercial entre China y EEUU y sus efectos en la economía local.
Finalmente, y haciendo un guiño a los presentes, el jefe de Estado destacó que la minería es uno de los grandes motores del país y que debe ser uno de los actores principales en las metas antes señaladas, siempre teniendo en cuenta el bienestar de los ciudadanos y del medioambiente.
Por su parte, desde la minería, según consigna Pulso, el presidente de la Sociedad Nacional de Minería, Diego Hernández, en su discurso valoró el carácter pro inversión del actual gobierno, y se refirió también a la reforma laboral. “Estamos convencidos de que los daños que generó son mayores que los aportes. Es más, solo agregó rigidez a las relaciones laborales”.
Hernández planteó que la legislación debiera apuntar a una relación empresa-sindicato que no sólo se remita a remuneraciones o bonos, sino que aborde temas más amplios como flexibilidad laboral y salarios variables, entre otros. “Todo lo cual apuntaría, sin duda, a mejorar la productividad y la estabilidad laboral”.
