Según el parlamentario por el distrito 20, quien asistió a la audiencia de la Comisión de Distorsión de Precios, el proceso que se está dando en Chile “es lo que corresponde en un Estado democrático”, vale decir “elevar estos antecedentes al organismo fiscalizador que es la Fiscalía Nacional Económica, que de manera ejemplar, hace una audiencia pública en que todos los exponentes entregan sus antecedentes”.
El diputado socialista por la Región del Biobío, Jaime Tohá, fue uno de los participantes en la audiencia de este jueves en la Comisión de Distorsión de Precios, en la Fiscalía Nacional Económica, que investiga el dumping de China a sus productos de bolas de acero, usados en la minería nacional.
La instancia fijó en enero pasado una medida provisoria que grava en un 9% las importaciones de este producto, una alternativa respaldada por los productores locales de estos insumos para la minería, sindicatos y parlamentarios, que esperan que se aplique en forma permanente
Sin embargo, esto ha motivado un encendido e inédito reclamo del gobierno chino, apoyado por los gremios mineros chilenos. En una entrevista con El Mercurio, el consejero Económico y Comercial de la sede diplomática china, Lui Rutao, golpeó la mesa y advirtió que el gravamen «podría perjudicar el dichoso presente y futuro prometedor de nuestra cooperación económico-comercial bilateral».
Por eso, ante la instancia, el parlamentario por el distrito 20 advirtió sobre la inconveniencia de estos reclamos del Gobierno chino. “Debemos mirar con precaución amenazas veladas que se ha esgrimido desde China, que si acá se toman medidas va a tener consecuencias. Esa es la contrapartida de lo que no es un Estado de derecho”, agregó el legislador.
Según Tohá, el proceso que se está en Chile “es lo que corresponde en un Estado democrático”, vale decir “elevar estos antecedentes al organismo fiscalizador que es la Fiscalía Nacional Económica, que de manera ejemplar, hace una audiencia pública en que todos los exponentes entregan sus antecedentes y que nosotros esperaremos las conclusiones y las aceptaremos como tiene que ser en una institucionalidad de un Estado democrático”.
Tohá puntualizó que “aquí en Chile somos serios. Esta institución es autónoma, no responde al parlamento ni al gobierno. Los antecedentes que yo tengo, es que hay presunciones de que puede haber un dumping, pero quien lo tiene que analizar es la fiscalía y nosotros daremos por buena lo que esta diga”.
De acuerdo a los reclamos que constan en el proceso, las bolas de origen chino están prácticamente inundando el mercado chileno, a precios incluso bajo su costo de fabricación, pero subsidiados por el Gobierno chino. En Chile, la consecuencia es una industria local mermada que no solo afecta a productores de acero como CAP en Talcahuano, que entrega las barras con las que los productores nacionales elaboran las bolas, sino también a toda una cadena de proveedores y contratistas, lo que tiene en grave riesgo a la Región del Biobío, con los efectos sociales que ello conlleva.
