Andes Iron, propiedad (74%) de la familia Delano Mendez y propietaria del proyecto a construirse en el norte del país, logró que la Corte Suprema pidiera al tribunal especializado revisar los aspectos técnicos que llevaron al rechazo de un comité de ministros del gobierno anterior, en 2017.

Conocido el fallo emitido por el Primer Tribunal Ambiental de Antofagasta (1TA), el cual resolvió en forma unánime que el proyecto minero-portuario Dominga cumple con la normativa ambiental vigente, además de haber presentado toda la información necesaria para su correcta evaluación ambiental, Andes Iron, titular del proyecto Dominga, manifestó su parecer, haciendo un positivo balance tras la sentencia.

«Valoramos positivamente la sentencia emitida por el 1TA, órgano jurisdiccional especializado e independiente llamado a evaluar, por expreso mandato de la Excelentísima Corte Suprema, los aspectos sustantivos y de fondo de la evaluación técnica y ambiental realizada del proyecto Dominga al interior del Sistema de Evaluación de Impacto Ambiental (SEIA), que administra y coordina el Servicio de Evaluación Ambiental (SEA)», señaló la minera en una declaración.

De acuerdo al escrito, la sentencia del tribunal ambiental establece «inequívocamente que los antecedentes aportados por el titular del proyecto son suficientes y completos, y que el proyecto Dominga da cabal cumplimiento de las normas ambientales vigentes que regulan la evaluación jurídica y técnica de este tipo de proyectos».

Los titulares del proyecto sostuvieron que «es importante señalar que cada vez que el proyecto Dominga se ha sometido a instancias de evaluación técnica, ha recibido sendos pronunciamientos favorables, tal como se establece, primero, en el Informe Consolidado de Evaluación (ICE) —que recomendó a la Comisión Regional aprobar el proyecto Dominga— y ahora en esta sentencia dictada unánimemente por el 1TA».

«Confiamos en que este nuevo fallo favorable de un tribunal de la República permita dar inicio prontamente a la fase de construcción de este proyecto. Esperamos que esto ocurra el segundo semestre de 2021, una vez que se hayan cumplido los requerimientos establecidos por el tribunal», agregan.

Andes Iron definió a Dominga como «un proyecto moderno, diseñado bajo los más exigentes estándares mundiales en materia tecnológica y de sustentabilidad con su entorno. Asimismo, —añade— es un proyecto responsable con la Región de Coquimbo y con la comunidad de La Higuera, con quienes hemos desarrollado un ‘acuerdo marco’ a través del cual nos comprometimos con un ‘royalty social’ al obligarnos a compartir los beneficios con todos los habitantes de la comuna.

Y a su parecer se trata de «un proyecto anhelado por la inmensa mayoría de los habitantes de la región y especialmente de la comuna de la Higuera, en la que tendrá un impacto económico y social sumamente relevante, generando cerca de 10.000 empleos directos en su etapa de construcción».

«Estamos convencidos que, en el siglo XXI, es fundamental que los proyectos mineros se realicen con un claro compromiso de cuidar del medio ambiente. Para ello, dentro de las medidas contempladas en nuestro Estudio de Impacto Ambiental (EIA), deseamos destacar nuestro compromiso de crear el Centro de Estudios del Mar destinado a proteger eficazmente las reservas marinas existentes en la comuna de La Higuera», destacaron.

La empresa aprovechó para hacer un llamado a la ONG Océana Chile «a sumarse a esta iniciativa del centro de estudios, al igual como lo hace Océana en Estados Unidos (California) en instancias similares, que buscan armonizar el desarrollo sostenible y el debido cuidado del patrimonio natural en base al conocimiento científico».

En Andres Iron creen que la nueva minería tiene que ser sustentable e indicaron que se han comprometido con a lo menos un 30% de la energía que necesitará el proyecto provenga de fuentes renovables, ojalá producidas en la misma comuna o en la región. «Queremos, asimismo, participar en los estudios que el país está realizando acerca del hidrógeno verde, como también subirnos al mundo de la electro-movilidad», anticiparon.

Y reiteraron su compromiso de que el agua que se va a utilizar en los procesos productivos de Dominga va a provenir en un 100% del mar y que compartirán el agua que desalarán con los habitantes de la Higuera, tal como fue solicitado por las comunidades.

Finalmente el escrito relata que, a la fecha, los dueños de Andes Iron han invertido más de $ 265.000 millones en el proyecto Dominga, destinando recursos a contar con estudios técnicos y ambientales que aseguren la materialización de un proyecto moderno y sustentable.

Acerca de Dominga

Dominga es un proyecto minero portuario ubicado en la comuna de La Higuera, 70 kilómetros al norte de la ciudad de La Serena. Producirá anualmente 12 millones de toneladas de concentrado de hierro y 150 mil toneladas de concentrado de cobre. Con una inversión de US$2.500 millones generará 10.000 puestos de empleos directos durante su construcción y 1.500 operación.

Considera la construcción de una planta desalinizadora que permitirá utilizar 100% de agua de mar en todos sus procesos, donando parte de esa agua a los habitantes de la comuna de La Higuera.

Al Terminal de Embarque de Dominga, llegarán entre 4 a 6 barcos al mes, por una zona en donde actualmente transitan más de 2.000 buques al año.

Quienes se oponen a la iniciativa denuncian que Dominga, que se ubicaría 60 kilómetros al norte de la central ciudad de La Serena -cerca de reservas ecológicas-, causaría un grave daño ambiental en la región.

El presidente de la gremial minera Sonami, Diego Hernández, también calificó de «buena noticia» la decisión ya que permitirá ser revisado debidamente.

Dominga «ha pasado por un excesivo período de tramitación y que, no obstante, haber cumplido con todas las exigencias que la autoridad ambiental le ha hecho, después de diversos procesos considerados en la legislación, aún no cuenta con la certeza de que pueda llegar a materializarse», afirmó Hernández.

Los alegatos del caso ante el tribunal ambiental se habían presentado en marzo del año pasado.

«Los antecedentes aportados por la empresa en el proceso de evaluación ambiental son completos, según los estándares existentes a la época de su evaluación y, si bien existen puntos que la empresa debe complementar, éstos pueden realizarse en el marco del proceso de evaluación», dijo el fallo.

El proyecto adquirió matices políticos, ya que mientras algunos denunciaron una vinculación inicial del proyecto con el presidente Sebastián Piñera, otros señalaron que el proyecto se ubica cerca de terrenos de propiedad de la expresidenta Michelle Bachelet.