MERCADOS
Crédito: Agencia Uno
En medio de escenario económico nacional marcado por el ciclo inflacionario más alto de los últimos años, presionado tanto por factores internos como externos, la presidenta del Banco Central, Rosanna Costa, entregó las proyecciones de la economía para 2023, afirmando que la inflación comenzará a ceder. «Lo que hemos visto en este período es resultado de un desbalance de nuestra economía y que se ha tratado de corregir con política monetaria y la contribución de la política fiscal. Sobre esto se han ido instalando shocks externos adicionales», manifestó. «Hacia adelante, lo que vemos es una economía donde las presiones inflacionarias deberían ceder, y que está empezando a cerrar sus brechas. Ya no tenemos la brecha de 5% del PIB que mostramos en trimestres previos de 2022, y estamos proyectando una convergencia, un cierre de la brecha para el primer trimestre de 2023 y que será negativa en adelante», complementó.
En medio de un complejo escenario marcado por el ciclo inflacionario más alto del último tiempo, la presidenta del Banco Central (BC), Rosanna Costa, entregó las proyecciones del ente emisor para la economía en 2023, asegurando que las presiones inflacionarias deberían comenzar a ceder, ya que está empezando a «cerrar sus brechas».
El instituto emisor cambió su pronóstico de caída del PIB para el próximo año a entre -0,75% y -1,75% y, además, subió la estimación de la inflación para el cierre del mismo año a 3,6% en comparación al 3,3% del informe de septiembre pasado.
No obstante, Costa explicó a La Tercera que la economía está cumpliendo con el ajuste, que la inflación irá cediendo y, a partir del segundo semestre de 2023, la actividad retomará su cauce. Luego de que el ente mantuviera el tipo de interés rector en 11,25%, Costa apuntó que la tasa seguirá en el mismo nivel «hasta que las condiciones macroeconómicas nos indique que se consolida la tendencia de la inflación al 3%.
Las proyecciones del ente emisor para el IPC a fines de 2023 es de 3,6%, cifra distinta a lo estimado por diversos analistas, que sitúan el número entre 4% y 5%. En ese sentido, Costa explicó los fundamentos del BC.
«Lo que hemos visto en este período es resultado de un desbalance de nuestra economía y que se ha tratado de corregir con política monetaria y la contribución de la política fiscal. Sobre esto se han ido instalando shocks externos adicionales», manifestó.
«Partimos en marzo con un diagnostico de guerra de corta duración por la invasión de Rusia a Ucrania. Finalmente, la guerra ha sido más larga y sus efectos muchos más persistentes. Tuvimos más inflación en los países desarrollados y la reacción de los mercados fue significativa. Es decir, han surgido una serie de shocks que han presionado la inflación», complementó Costa.
En cuanto a las proyecciones, la timonel del BC aseguró que «hacia adelante, lo que vemos es una economía donde las presiones inflacionarias deberían ceder, y que está empezando a cerrar sus brechas. Ya no tenemos la brecha de 5% del PIB que mostramos en trimestres previos de 2022, y estamos proyectando una convergencia, un cierre de la brecha para el primer trimestre de 2023 y que será negativa en adelante».
«Estamos observando claramente el PIB no minero cayendo en el segundo y tercer trimestre. Estamos viendo un consumo que empieza una trayectoria de regularización y empieza a bajar. Vemos hacia adelante que el mercado laboral no presenta la estrechez que veíamos previamente, con salarios reales que van cayendo y hogares que han ido normalizando su exceso de liquidez», concluyó Costa.
