Alcoa no solo es la primera empresa del Dow Jones en rendir cuentas de su negocio. Sus números sirven de barómetro para anticiparse al signo que tendrá la temporada de presentación de resultados en Wall Street.
Al cierre de la jornada de hoy en la Bolsa de Nueva York Alcoa se encargará de dar el pistolazo de salida a una nueva temporada de presentación de resultados, en este caso, los correspondientes al primer trimestre de 2013.
Las previsiones se han ido enfriando a medida que se ha acercado el inicio de la temporada. Prueba de ello es que en enero los analistas auguraban un incremento del 1,2 % en los beneficios de las empresas integrantes del índice Standard & Poor's 500.
La debilidad económica persiste, y los expertos se han visto obligados a revisar a la baja sus proyecciones. De acuerdo con el sondeo elaborado por Bloomberg, las empresas del S&P 500 anunciarán un descenso medio del 1,8 % en sus beneficios.
En el caso de Alcoa, las previsiones anticipan un beneficio de 8 centavos de dólar por acción, dos céntimos menos que en el primer trimestre de 2012.
Las cifras de Alcoa no solo generan gran expectación entre sus accionistas. La acogida de sus resultados en bolsa sirve de barómetro para intentar adivinar la evolución de Wall Street hasta el inicio de la siguiente temporada de resultados.
Dese el año 2002, cada vez que Alcoa se ha comportado por encima del mercado, el índice S&P 500 se ha anotado subidas medias del 2,5 % en los 90 días siguientes, según Bloomberg.
Por el contrario, cuando el fabricante de aluminio ha tenido un peor comportamiento en bolsa que el conjunto del mercado, tras publicar sus resultados, el índice S&P 500 ha limitado su subida en el trimestre al 0,5 %.
