El último Enade de la era Piñera se celebra con el sistema financiero cuestionado por caso Cascadas y la crisis del Grupo Saieh y con el empresariado nervioso por los cambios que se vienen con el inminente regreso de Michelle Bachelet al poder.
Este año el Encuentro Nacional de la Empresa, donde cada año se reúnen los hombres y mujeres más poderosos de Chile, se adelantó en más de un mes y cayó justo en medio de uno de los mayores escándalos a la confianza pública. La sombra de las Cascadas cruzará la Enade 2013 y es de esperar que Andrés Santa Cruz, el presidente de la Confederación de la Producción y del Comercio, o alguno de los cuatro candidatos presidenciales invitados –Michelle Bachelet, Evelyn Matthei, Marco Enríquez-Ominami o Franco Parisi– haga alusión al caso que ha conmocionado al mercado y que es tema obligado de conversación entre los empresarios.
Sebastián Piñera abrirá el evento en CasaPiedra, un cambio de los últimos años, cuando tradicionalmente el Presidente lo cerraba.
El menú no trae un plato novedoso como versiones anteriores, pero ocurre en momentos en que el modelo de los últimos 40 años está siendo cuestionado y entre el empresariado hay nerviosismo acerca de lo que se viene con el inminente regreso de Bachelet a La Moneda. Ella ya prometió una reforma tributaria para poder dar educación gratis para todos y una nueva Constitución.
El evento debería servir de marco para un amplio debate sobre el modelo a un mes de las elecciones. No hay que olvidar que se viene el fin del primer gobierno de la Alianza; un gobierno que puede mostrar grandes logros económicos, pero que fue marcado por un clima crispado en la calle y crecientes demandas sociales.
Manuel Bengolea, gerente general de la gestora de fondos para familias de alto patrimonio, Octogone, está convidado y va ir. “Hace cuatro o cinco años era un evento imperdible. Hoy en día no tiene el mismo magnetismo. Lo que vaya a decir Bárbara Figueroa (presidenta de la CUT) es predecible, porque va defender la postura de los trabajadores, y la gente del mundo empresarial va a defender la suya. El debate político va a ser un diálogo de sordos. Si tuviéramos un acuerdo en algo como para decir sobre esto vamos a discutir, sería interesante, pero no es así”.
Una de las grandes frases emanadas de la Enade fue la de Ricardo Ariztía, entonces presidente de la Confederación de la Producción y del Comercio, cuando –en la versión 2001– le dijo a Ricardo Lagos: “Señor Presidente, por favor, déjenos trabajar tranquilos” y le propuso un “pacto de honorabilidad” para sacar adelante la economía nacional.
El economista Tomás Izquierdo, gerente general de la consultora Gemines, dice que el temor del empresariado y el mundo inversionistas a lo que se viene es infundado: "Creo que se ha producido algún grado de paranoia respecto al próximo cambio de conducción política, a partir de marzo del 2014. Haciendo una caricatura exagerada, la sensación es que una sociedad civil empoderada, que ha hecho fuerte eco en la clase política, va a echar el exitoso modelo económico chileno, que más que mal cuenta con admiradores en todo el mundo, por la borda. Que se va a instalar una suerte de Estado benefactor (o repartidor) que asfixiará la sana iniciativa privada, llevándose de paso nuestro crecimiento económico al tacho".
Izquierdo, en un informe para sus clientes, dice que "tal cual sucedió previo a la elección de Ricardo Lagos, es que aquellos que se dejen arrastrar por el temor, dejando de invertir sólo por esta incertidumbre, arriesgan quedar rezagados respecto de aquellos otros, probablemente más pragmáticos, que saben que no se vienen grandes cambios, o al menos cambios que amenacen mucho la rentabilidad de su inversión".
El debate sobre el modelo lo sostendrán, durante el almuerzo, Guillermo Larrain, ex titular de la SVS y parte del comando de La Nueva Mayoría, y José Ramón Valente, economista neoliberal y parte del comando de Matthei.
El encuentro ocurre tan sólo a cuatro días desde que el Presidente admitiera que el caso Cascadas y la crisis del Grupo Saieh afectó la confianza del sistema financiero. Por eso las expectativas están puestas en lo que opinarán los invitados de dos de los mayores escándalos a la confianza pública en la historia de Chile.
En el pasado, Icare estima que ha tenido un liderazgo importante en la discusión sobre el fortalecimiento de los gobiernos corporativos y por eso se anticipa que el tema se tomará parte de la agenda.
Anoche, en la cena anual de la Sofofa, el presidente del gremio, Hermann von Mühlenbrock, lanzó una dura condena a empresarios "que han actuado con falta de ética o han caído en la estafa"
"Condenamos con mucha fuerza aquellos casos en los que empresarios, víctimas de la codicia y el egoísmo, han traspasado los límites de la confianza y han actuado con falta de ética o, derechamente, han caído en la estafa", sentenció.
