Sigue la venta de activos del Grupo Saieh para salir de la crisis financiera que gatilló los problemas de SMU.
Ayer el holding supermercadista anunció, a través de un hecho esencial, la venta de Dipcac como parte de su plan de desinversión de activos no estratégicos.
El comprador fue Guillermo Villablanca, ex dueño de la cadena mayorista cuando Saieh la compró como parte de Supermercados Alvi.
El precio base de la operación asciende a $ 1.446.109.000 (aproximadamente US$ 3 millones). En el hecho esencial, SMU clarifica que "lo anterior implica reconocer una pérdida contable no operacional, después de impuestos, por una sola vez, de aproximadamente US$ 12,9 millones en los resultados de la Sociedad, la cual será reconocida en los Estados Financieros al 30 de septiembre de 2013".
La operación implica el traspaso de 33 salas de ventas –donde trabajan 307 personas– y un centro de distribución, otorgándole además al comprador una opción de compra por otros 7 locales del formato minorista.
En entrevista con el Diario Financiero, que por algún motivo informó que la venta era por casi US$ 7 millones, el gerente general del holding, Marcelo Gálvez, dijo que “la enajenación de Dipac marca un hito importante como señal para el mercado y para los acreedores, ya que es la primera operación que se realiza en el marco de la enajenación de activos no estratégicos contemplados en nuestro plan de fortalecimiento financiero y mejoramiento de la competitividad”. Gálvez dijo que Dipac representaba 1,8% del total del negocio de SMU, "considerando los datos acumulados a septiembre".
El precio de venta es menos de la mitad de lo que el Grupo Saieh habría pretendido. Al mercado se había filtrado que SMU obtendría alrededor de US$ 10 millones por la venta. Las ventas anuales son de alrededor de US$ 70 millones. Un analista del sector retail estima que, dada esa cifra, el precio al que se vendió es un poco bajo.
"El precio base está sujeto a un procedimiento de ajuste, de conformidad con la variación que experimenten el inventario y las cuentas comerciales y otras cuentas por pagar por Dipac", señala el hecho esencial. Agrega que "se debe adicionar o restar del precio base, en su caso, la diferencia que exista entre la caja y las cuentas por cobrar por Dipac a esa fecha".
Cabe recordar que Dipac fue adquirida cuando Saieh compró la cadena de supermercados Alvi, por la cual pagó alrededor de US$ 120 millones.
"Da la impresión que quiere una venta rápida, ya que el precio es bajo –aunque hay algunas variables que lo podrían hacer más atractivo–. A eso hay que sumarle las duras condiciones que aceptó en la venta de las compañías de seguro y los problemas que está teniendo con deshacerse de Montserrat", es el análisis de un ejecutivo de una corredora que ha hecho negocios con el grupo en el pasado y lo conoce bien.
El holding financiero de Alvaro Saieh ha tomado medidas drásticas para salir de la crisis de liquidez. Vendió las aseguradoras a ILC por US$ 170 millones, un buen precio, pero con duras condiciones (ayer los tenedores de bono aceptaron la venta); se deshizo del Mall de Rancagua y vendió una serie de sucursales por US$ 83 millones. En total, el grupo ha recaudado cerca de US$ 300 millones.
SMU aún pretende recaudar entre US$300 millones y US$400 millones adicionales a través de la venta de Construmart, la mayorista peruana Mayorsa, además del 40% que maneja en Supermercados Montserrat.
De acuerdo al Diario Financiero, Construmart tendría ya varios interesados, pero entre ellos no estaría Cencosud. Ayer el holding de Horst Paulmann salió a desmentir categóricamente una nota que decía que estaba entre los posibles compradores de la cadena.
Saieh está comprometido a inyectar US$ 300 millones en SMU, como parte del acuerdo con Southern Cross de hacer un aumento de capital por US$ 500 millones, destinados a solucionar de una vez por todas los problemas del holding de retail del grupo.
