2014 parece ser un año en que los equilibrios macro de la economía chilena podrían verse amenazados.
De acuerdo a un informe del BBVA, el gasto fiscal de este año podría ser uno de los más altos de los últimos años.
La razón: lo que BBVA llama "la relevante subejecución presupuestaria", agregando que "el favorable efecto base que genera debe ser considerado en las proyecciones de crecimiento del 2014".
En un informe para sus clientes, esa expansión del gasto público "podría colocar algo de contrapeso a la proyectada menor expansión del gasto privado".
"Aún sin cambios (incrementos) a la proyección de déficit estructural de 1% del PIB para el próximo año (que serán resorte del Gobierno en marzo), el gasto fiscal crecería por sobre 5% real, el segundo más alto después del 2010. La causa: relevante subejecución de gasto el 2013. En consecuencia, un eventual ajuste al déficit estructural del 2014 (hacia 1,5% del PIB por ejemplo), dejaría la expansión del gasto fiscal total incluso sobre 7% real", es como lo explica el informe del BBVA.
De acuerdo al análisis del BBVA, las cifras fiscales de noviembre confirman una "lenta ejecución del gasto al cierre de 2013 y el impacto será que empujará crecimiento del gasto en 2014 por sobre 5%".
El gasto del Gobierno Central Total creció sólo 1,3% en noviembre, acumulando un incremento de 5,1% en lo que va corrido del año.
"Estamos viendo una menor expansión interanual de la inversión privada, pero también esta contribuyendo un muy acotado crecimiento de la inversión pública, probablemente explicada por el término de la inversión asociada al proceso de reconstrucción post-27F", dice el documento.
De acuerdo a la DIPRES, el gasto alcanzó en noviembre una ejecución acumulada de 83,3% de la Ley Aprobada, cifra que es inferior al 83,7% de ejecución a igual mes del año pasado.
El BBVA estima que de no haber sorpresas en diciembre, "estimamos que al cierre del año 2013 el gasto total crecería 4,7%, muy por debajo del 5,9% proyectado por el Gobierno (Dipres) con ocasión del Presupuesto 2014", agregando que "de cumplirse esta proyección, solo por efecto base, estimamos que el Presupuesto Aprobado para el 2014 significará un crecimiento algo superior a 5%, por sobre el guarismo de 3,9% que se empleó en la discusión presupuestaria".
Su conclusión es que el próximo año podríamos ver un impulso fiscal incluso mayor al de 2013 y el segundo más alto luego del espectacular 2010.
