El bajo crecimiento ya se siente entre los consumidores.
El Índice de Percepción del Consumidor (IPeCo) de febrero del Centro de Estudios en Economía y Negocios de la Universidad del Desarrollo determinó que la confianza de los consumidores ha retrocedido a niveles que no se observaba desde agosto de 2013.
Según el análisis de la UDD, el contexto de desaceleración podría afectar en los próximos meses al empleo, con lo cual se intensificará el efecto adverso sobre la confianza de los consumidores. Esto se debe a que si bien el 2013 terminó con un crecimiento de 4,1%, inferior al proyectado a principios de este año, la Encuesta de Expectativas del Banco Central proyecta que para este trimestre el crecimiento será de apenas 3,2%.
De acuerdo al estudio, la desaceleración de los próximos meses intensificará el efecto adverso sobre la confianza de los consumidores, que retrocederá gradualmente a un nivel neutral, luego del optimismo reinante.
El Índice de Expectativas elaborado por la centro de estudios, que pondera las variables de percepción acerca del desempleo, situación económica e ingreso familiar contempladas en un horizonte de 12 meses, también registró una caída en todas ellas.
La visión de los consumidores respecto del desempleo futuro retrocedió significativamente, desde un optimismo moderado a un nivel neutral, mientras que la visión de la situación de la economía futura se mantuvo moderadamente optimista. Por su parte, la percepción de los ingresos futuros retrocedió desde un nivel moderadamente optimista a levemente optimista. En todos los casos hubo disminuciones marginales de optimistas y aumentos de pesimistas.
Pese a la caída de las percepciones en el marco general, destaca que la confianza de los consumidores del estrato C3 se mantuvo optimista a diferencia de los demás estratos sociales, sobre todo en el segmento D, donde la confianza retrocedió significativamente.
